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La Mujer en el Arte (video de You Tube)

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3 minutos de tanta belleza -y tan rápida- que confunde...

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Juan Blanco

El útimo discurso de Fidel

El útimo discurso de Fidel

Argos Is-Internacional





"Contrainformación en la RED"

MIEMBRO DE LA 'CAMACOL' Y DE LA 'FELAP'

"La educación y la instrucción no consisten en rellenar la mente de ideas ajenas, sino en estimularla para que produzca sus propias ideas"

MARCOS JESUS CONCEPCION ALBALA




Presidente de Argos Is-Internacional 


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TELEF.- (786) 556-3519

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Cuba: El último discurso de Fidel







CUBA… ARGOS: ABRIL 29 DE 2007…

Por Koldo Campos Sagaseta




Tambaleándose como consecuencia del cáncer fulminante y terminal que, asegura la CIA y allegados, afecta a Fidel desde hace alrededor de cuarenta años, y con visibles muestras de dolor por sus últimos cinco accidentes cardiovasculares escondidos a los medios de comunicación, el comandante llegó hasta la tribuna sin poder disimular la cojera que, tras su percance hace dos años lo ha obligado a pasar repetidas veces por el quirófano para ser operado de sus múltiples fracturas.

Entre gestos de acusado padecimiento por las secuelas de su conocida insuficiencia renal aguda, el dirigente cubano, antes de dirigirse a los presentes, levantó a duras penas su puño derecho en el que eran evidentes las huellas del mal de Parkinson y esbozó una sonrisa que puso en evidencia el terrible padecimiento del escorbuto que, al parecer, contrajo en su juventud.

En contra del parecer del equipo médico habitual que siempre lo acompaña por si sufre otra nueva recaída en su cirrosis hepática, Fidel Castro desechó la silla que se le ofrecía y optó por dirigirse a su auditorio de pie, luego de respirar profundamente buscando renovar el aire de sus enfermos pulmones tras sufrir cuatro edemas y seis enfisemas sólo el mes pasado.

Una vez pudo beber un vaso de agua, al parecer, mezclado con un fuerte analgésico que le permitiera sobrellevar los dolores que ha dejado en su decaído organismo la osteoporosis degenerativa que sufre desde su infancia, el comandante Fidel Castro esperó a que cesaran los gritos de júbilo de los congregados, aprovechando para masajearse él mismo el corazón y superar, sin que nadie lo advirtiera, excepto la CIA y allegados, otra arritmia coronaria semejante a las 22 que ha padecido en lo que va de mes.

Hecho el oportuno silencio, Fidel Castro, tras algunos carraspeos con los que disimular la gravísima afección de sus cuerdas vocales, superó otro nuevo ataque de difteria, se recuperó de la acusada disentería que padece y se sobrepuso a otra arremetida de la gripe aviar, antes de iniciar su intervención frente a decenas de miles de habaneros y cubanos que, presuntamente, también están enfermos.

"Compañeros y compañeras, comparezco ante ustedes para hacerles partícipes de una trascendental decisión unánimemente respaldada por nuestro Congreso, y que sólo depende de su parecer para ser aprobada.

Y es que hemos dispuesto una serie de profundos cambios que transformen completamente la revolución cubana hasta convertirla en una democracia semejante a las que nos rodean.

En materia de educación, vamos a proceder inmediatamente a una masiva campaña de animalización que devuelva al pueblo cubano a la feliz ignorancia en que vivía antes de la llegada de la revolución.

Quedarán erradicadas de las escuelas costumbres tan obscenas y perniciosas como la del desayuno escolar, sustituyendo la leche y el pan por la inhalación de cemento y gasolina.

Igualmente, estimularemos en nuestros estudiantes conductas tan civilistas y democráticas como las que se dan entre nuestros vecinos del norte porque, y lo declaro consternado, todavía nuestros estudiantes de primaria y kinder no han logrado protagonizar ninguna matanza escolar digna de encomio, ni han sido capaces de violar a compañeritas o entrarle a balazos a los profesores y compañeros. Semejante atraso vamos a contrarrestarlo sometiendo a nuestros estudiantes a permanentes exposiciones de cine y televisión genuinamente "americanas", además de sustituir los caducos y trasnochados principios de nuestra educación por los competitivos valores de la estadounidense.

También procedemos al masivo cierre de escuelas e institutos para que pueda nuestra infancia deambular desnuda y descalza por las calles del país, recogiendo botellas, prostituyéndose y ejerciendo otras sanas actividades comerciales y mercantiles que les ayuden a comprender las características de la sociedad a la que nos abrimos.

Ocasionalmente, como ocurre en otras democracias latinoamericanas a las que debemos abrirnos, tal y como nos pidiera su santidad Pablo VI, procederemos a un ordenado y meticuloso asesinato de los excedentes infantiles en las calles del país para lo que ya estamos entrenando a nuestros policías, asesorados por mandos de Colombia y Brasil.

En relación a la salud vamos a suprimir de nuestro ineficaz sistema hospitales y laboratorios, estableciendo, en su lugar, modernos consultorios de curanderos.

En los centros médicos que se mantengan se impondrá el cobro compulsivo, como previa garantía al internamiento del paciente, incluidas las urgencias. Quienes no estén en condiciones de afrontar los pagos serán reenviados democráticamente a la democrática calle.

En los centros de maternidad, como ocurre en otras democracias vecinas, cada cama será ocupada por dos y tres parturientas para que puedan compartir tan hermosa experiencia, ayudarse en el conteo de las dilataciones y pujar juntas.

La injusta distribución de vástagos será sustituida por la permuta de bebés y los secuestros de recién nacidos, tal y como ocurre en países vecinos.

De manera inmediata vamos a proceder al cierre del Hospital Pediátrico de Tarará, a 20 kilómetros de La Habana, donde el Estado cubano ha venido atendiendo, absolutamente gratis, a 25.000 niños y niñas de Chernobil y otros países del tercer mundo, para poder dedicar esos enormes gastos que veníamos despilfarrando, a la inversión en Bolsa.

Por la misma razón será cerrada la Universidad Internacional de Medicina, donde miles de estudiantes latinoamericanos sin recursos estudian esa carrera.

En materia de orden público, Cuba se propone transformarse en una democracia ejemplar, semejante a las que nos rodean. A pesar de la férrea represión que ejercemos en esta isla, todavía no hemos podido protagonizar, en casi 50 años de revolución, una sola matanza popular que nos distinga.

Todavía, y lo digo con pesar, no hemos podido emular matanzas como la de Tathelolco, en México, donde el ejército de ese país masacró a un millar de estudiantes, o la de Chiapas, más recientemente, donde fueron asesinados decenas de indígenas.

Todavía no hemos podido llevar a efecto matanzas como las protagonizadas por policías brasileños en la favela carioca de Vigario Geral donde se exterminó a 21 pobladores en 1993 y a 400 garimpeiros en la selva amazónica en 1987.

Ni siquiera hemos podido desarrollar una discreta matanza de estudiantes como la que ejecutaran soldados estadounidenses en el Canal de Panamá reprimiendo los insensatos reclamos de soberanía para la zona, apenas un ensayo del eficaz bombardeo sobre el barrio Los Chorritos en el que murieron 3 mil panameños cuando, años más tarde, invadieron ese país.

Todavía no hemos podido reeditar un "Cerro Maravillas puertorriqueño, o poner en funcionamiento campos de concentración como el que tienen los estadounidenses en Guantánamo.

Apesadumbrado declaro que todavía estamos muy lejos de alcanzar la eficacia interrogadora de los estadounidenses como ponen de manifiesto en Iraq, ni hemos aprendido a disparar contra periodistas con la precisión y el alcance de los marines en Iraq.

Todavía, y lo digo con hondo pesar, no hemos podido protagonizar matanzas populares como las de Abril del 84 en República Dominicana o los varios "caracazos" y "bogotazos" que recoge la historia americana.

Así que, para corregir este histórico retraso y siempre pensando en democratizar nuestra sociedad, vamos a proceder de inmediato a asesinar, como en Guatemala, cuatro monjas y un obispo cada cierto tiempo. Vamos a asesinar en plena eucaristía, emulando los ejemplos salvadoreños, a un cardenal y a cinco jesuitas de vez en cuando.

Vamos a asesinar a pérfidos estudiantes y cómplices profesores como en la democracia peruana y a dar muerte a peligrosos comunicadores como nos instruyera la democracia argentina en las personas de Bonino y Cabezas, el mismo gobierno peruano en los Andes de ese país, el estado colombiano a cada rato, o como ocurriera en República Dominicana con Orlando Martínez, Goyito y Narcisazo.

Vamos a volar por los aires a opositores al régimen, como hiciera la democrática policía de Pinochet y la propia CIA nos ilustrara con el asesinato de Letelier a un par de cuadras de la mismísima Casa Blanca.

Vamos a hacer desaparecer no sólo las quejas de los inconformes disidentes sino también los disidentes, considerando las sabias experiencias de las democracias militares de Argentina, Chile y Uruguay y sus operaciones Cóndor.

Vamos a asesinar a algún que otro Colosio opositor, al igual que en México, y a proceder a nutridas matanzas de negros, como en la democracia estadounidense en los años sesenta o, más recientemente, en Los Angeles, luego de los desórdenes ocurridos tras el democrático apaleamiento de un supuesto ciudadano negro.

Y para mejor iniciar estas reformas, vamos a proceder a la voladura de algún que otro avión de pasajeros, tal y como lo hicieran demócratas como Posada Carriles y Orlando Bosch.

En materia de deporte vamos a prohibir definitivamente costumbres tan insanas y repugnantes como correr, saltar y otras impudicias semejantes, así como a cerrar estadios y canchas deportivas para inaugurar en su lugar casinos, hipódromos, galleras, canódromos, bancas de apuestas y loterías, caraquitas, rifas diplomáticas, y otras lúdicas recreaciones.

En el campo de la cultura cerraremos todas las escuelas de cine, de teatro, de danza y de otras denigrantes actividades para la condición humana, fomentando en su lugar los combos y estimulando el reguetón y otras delicias musicales contemporáneas que ensalcen virtuosos bailes, tan del agrado de los turistas, como "el perrito", "el pollito", "el pingüino", "el maco‑penpén" y "pónmelo ahí que te lo voy a partir".

También se promoverán espectáculos como los "wte t‑shirt" y toda clase de desnudos, por supuesto, artísticos.

En el área de la vivienda ya se está trabajando en la construcción de modernos condominios al estilo de las democracias próximas y que, en su honor, se llamarán La Ciénaga, El Hoyo de Chulín, Vietnam, Camboya, La Puya, Los Cartones y La Cucaracha, todos dotados de sus correspondientes aguas negras.

En relación al trabajo ya se encuentra en estudio un proyecto de diversificación laboral globalizada para que muy pronto encaremos los retos del nuevo milenio con nuevos oficios y profesiones como: limpiavidrios, buceadores, chiriperos, billeteros, botelleros, vendeperros, quinieleros y otros oficios semejantes.

De igual forma, los anacrónicos monumentos al Ché, Máximo Gómez o Martí, serán sustituidos por monumentales faros en homenaje al pirata Drake, a empresarios como Capone o Luciano y a otros héroes continentales.

Todo lo cual dispongo para su conocimiento.


¡Demo –crak- CIA o muerte! ¡Venceremos!







Jordi Borja: «El mercado dejado suelto es destructor de la ciudad»

www.revistateina.com/teina/web/Teina4/dossierjordiborja.htm
Revista Teína, Valencia
nº 4, "Ciudad", 2005

ENTREVISTA A JORDI BORJA
Geógrafo y urbanista

«El mercado dejado suelto
es destructor de la ciudad»

 

Para el geógrafo y urbanista catalán, el mercado no puede actuar sin restricciones en las ciudades. Considera que la ciudad-negocio destruye la ciudad, y reclama que los poderes públicos reduzcan los efectos desequilibrantes que el mercado suelto genera. Y asegura que la ciudad seguirá siendo un espacio de dinámicas y situaciones contradictorias.

Por Lucio Latorre
lucioteina@yahoo.es

 

Entre las muchas temáticas que con marcada lucidez aborda en su libro más reciente, La ciudad conquistada (Alianza Editorial, 2003), Jordi Borja deja en claro la necesidad de limitar el libre albedrío de mercado a la hora de hacer ciudad. Rechaza también la idea de que la sociedad atraviese por un proceso de despolitización, y sostiene que de la ciudad de los próximos años, de la ciudad que está por venir, sólo tenemos tendencias e insinuaciones pero no certezas acerca de cómo será. Sobre éstas y otras cuestiones conversó con teína.

 

- Usted destaca que la ciudadanía es una conquista cotidiana y que la vida social urbana nos exige conquistar constantemente nuevos derechos o hacer reales los derechos que poseemos formalmente. ¿Qué pasa cuando no se ejerce esa ciudadanía, esos derechos, o cuando a numerosos habitantes de las ciudades (como a los sin papeles) se les niega tal posibilidad?

- En la medida, por ejemplo, que no se les reconoce el derecho a voto, tienen menos capacidad de expresión y de presión política; en la medida que no tienen papeles tienen más dificultades para acceder a los servicios, al empleo, etcétera. Por lo tanto, en cierta medida, las personas a las que no se les reconocen esos derechos, no son ciudadanos.

- Señala que la crítica social siempre ha tenido efectos positivos en el momento de hacer ciudad. ¿En épocas de marcada despolitización se puede esperar que ese tipo de movilizaciones sigan y que, en ese caso, consigan los objetivos perseguidos?

- No creo que exista despolitización. Lo que ocurre es que la politización se manifiesta de formas diferentes. Por ejemplo, hay un desapego o una pérdida de confianza en los partidos políticos, pero la gente va a votar de todas formas. Puede haber un cierto desinterés para movilizaciones muy ideológicas y, al mismo tiempo, por ejemplo, aparecen los movimientos antiglobalización, que por cierto son bastante ideológicos. En el caso de las ciudades, como es el caso español, ha habido un proceso de gestión democrática de los ayuntamientos, con demandas y reivindicaciones que antes movilizaban a la gente pero que ahora no ocurre, lo cual está muy bien porque quiere decir que las administraciones públicas prestan unos servicios y responden a demandas importantes de la población. Pero de todas formas, cuando esto no ocurre, aparecen las movilizaciones populares. Ahora la conflictividad vuelve a aparecer. La conflictividad en sí misma no es un mal ni un bien, sino que expresa un desequilibrio entre las ofertas y las demandas de las políticas públicas y sociales.

- En la ciudad multicultural se aprecian mucho estas contradicciones entre las diferentes demandas...

- Las ciudades siempre han sido multiculturales, lo que ocurre es que ahora estamos en la primera fase de una nueva dimensión de multiculturalismo. Las ciudades siempre se han desarrollado en gran parte a través de las migraciones. Los mismos tópicos que hoy se aplican a los magrebíes, años atrás se aplicaban a los murcianos o a los andaluces. Más o menos son los mismos tópicos. Ahora no hay ningún problema entre los catalanes de origen y los españoles provenientes de otras partes de España; en cambio, puede haberlo respecto a otras minorías. De todas maneras creo que eso es algo que no tiene mayor importancia, salvo cuando se utiliza para estimular los comportamientos xenófobos, racistas.

- También advierte de la desigualdad cada vez más creciente que se da entre sectores dentro de una misma ciudad, y cómo, a menudo, vastos sectores son directamente olvidados y ni siquiera reconocidos por las autoridades. Respecto a esto, Manuel Castells se teme que, de no reverse esta situación, las megaciudades tendrán universos paralelos en los que, por un lado, estarán sectores integrados y globalizados, y otros estarán segregados y excluidos. ¿Es eso lo que nos espera?

- Eso no es lo que nos espera, ¡esto es lo que es! Es decir, están mucho más cerca de Madrid, Valencia o Barcelona gente que vive a centenares de kilómetros y que está conectada a las diferentes ofertas culturales, que gente que vive en barrios de esas ciudades y que, sin embargo, están absolutamente desconectados de esas ofertas, de Internet y en general de la vida de ciudadanos. En general, en nuestras ciudades hay sectores que viven en condiciones de exclusión como si no se hubiesen enterado de que la economía y de que el mundo han cambiado porque quedan excluidos y están viviendo con estrategias de supervivencia.

- ¿Ésas son responsabilidades propias, ajenas, compartidas?

- Bueno, es que esto es consecuencia de un sistema de economía capitalista, de la lógica del mercado, de la exclusión política y de la falta de redes solidarias lo suficientemente fuertes en la ciudad.

- Usted es bastante crítico con el mercado...

- El mercado dejado suelto es destructor de la ciudad, porque en sociedades desiguales el mercado tiende a demandas desiguales y segrega estas demandas en los espacios, se crean guetos de ricos, de pobres, áreas funcionales, parques tecnológicos, etcétera. El mercado suelto destruye la ciudad; al mismo tiempo, la ciudad necesita el mercado porque la ciudad es fundamentalmente un lugar de intercambio y el mercado es una forma efectiva de asignar bienes y servicios. Lo que tiene que haber es un poder público que regule este mercado y que reduzca al máximo los efectos desequilibrantes que el mercado suelto genera.

- ¿Cómo se hace para que el poder público no pierda esto de vista?

- Mire, esto es fácil, otra cosa es que se quiera o no se quiera hacer. Es decir, un poder público puede hacerlo a través de fijar condiciones sobre el respeto al espacio público, a través de establecer cesiones de suelo para distintos usos, de no admitir que se hagan operaciones absolutamente homogéneas, que se incluyan viviendas protegidas... se trata de establecer condiciones que obliguen a los sectores privados a actuar respetando ciertos compromisos y ciertos equilibrios en cuanto a espacio público, a equipamiento, a diversidad de ofertas, en cuanto a precios, etcétera.


LA CIUDAD NEGOCIO

- En los últimos años se ha vuelto una constante (y en España sobran los ejemplos de ello) ver cómo numerosas ciudades se han volcado, a veces de manera frenética y precipitada, a construir edificios-emblemas (auditorios, museos de arte contemporáneo, etcétera), a encarar importantes procesos de transformación urbana y a la realización de grandes eventos, con las bienales de Arte como opción más repetida.

- Y ante tanta variedad de proyectos, los resultados también han sido diferentes. Los ha habido muy buenos, como no tanto. Para Borja, «los grandes proyectos en sí mismos no son ni buenos ni malos. Lo que es interesante es que las ciudades más exitosas han tendido en Europa a plantearse grandes proyectos de carácter integral. Es decir, no solamente de carácter urbanístico o de carácter social, sino integrando distintos elementos. Como actuaciones de recuperación de centros históricos, reconversión de áreas industriales, etcétera. Otra cosa es cuando la utilización del producto urbano, del edificio emblemático, cuando esas operaciones buscan crear una imagen de la ciudad, de una zona de la ciudad, a través de un edificio emblemático. Esto en algunos casos ha funcionado muy bien, como en Bilbao con el Guggenheim. En otros casos el edificio se ha adaptado perfectamente al entorno y es un elemento que le da un plus de cualidad, como el Kursaal de San Sebastián. Y también hay otros casos, como es el de Valencia con la Ciudad de las Ciencias y las Artes que me parece que es una operación absolutamente artificiosa en cuanto a su contenido cultural pero también en cuanto a su impacto sobre el territorio. Me parece artificiosa y presuntuosa. Yo no estoy en contra de los edificios emblemáticos, estoy contra esta reducción de la arquitectura a estos edificios y contra esta especie de alianza impía entre el divismo de los arquitectos, la afirmación de poder de los políticos y la ostentación de las grandes empresas».

- Lo que Ud. decía de que está en contra de la ciudad como negocio.

- En la ciudad se tiene que hacer negocios, esto es evidente. Ahora, lo que no se puede hacer es poner a la ciudad al servicio de los negocios, que es una cosa que ahora ocurre bastante en España.

- En su opinión, la ciudad es un espacio de dinámicas contradictorias cuya configuración futura no conocemos con certezas, sino que apenas la intuimos y presagiamos. ¿Cómo trabajar entonces de cara al futuro ante esa incertidumbre?

- La incertidumbre existe siempre en los procesos sociales y por lo tanto en el desarrollo de la ciudad. De lo que se trata es de fijar unos escenarios de futuro deseables a través de un proceso de debate ciudadano entre muchos actores. Decir hacia dónde queremos ir fijando, pues, unos elementos tanto físicos como de actividades, de las funciones de la ciudad... saber un poco cómo queremos que sea la ciudad del año 2010, la ciudad de 2020, y sobre todo concretar algunos proyectos importantes y algunos criterios para avanzar en esa dirección. Es lo que comúnmente se conoce como planeamiento estratégico o cosas parecidas, que es lo que permite tener un marco de referencia y un catálogo de actuaciones deseables. Teniendo esas perspectivas de futuro se trata de encontrar la combinación entre actuaciones concretas deseables y oportunidades para realizarlas.

 

 

¿Quién es Jordi Borja?

Jordi Borja es actualmente director del Máster de Políticas y Proyectos Urbanos de la Universidad de Barcelona, y ha participado en la elaboración de planes estratégicos y proyectos de desarrollo urbano de varias ciudades europeas y latinoamericanas. Lleva la organización del Diálogo Ciudad y ciudadanos del siglo XXI para el Fórum Universal de las Culturas 2004 en Barcelona. Entre los varios libros que ha publicado se destacan Local y Global: la gestión de las ciudades en la era de la información (Taurus Ediciones, 1997) en colaboración con Manuel Castells, y La ciudad conquistada, su publicación más reciente (Alianza Editorial, 2003).
Borja es, en resumen, uno de los urbanistas españoles más importantes y de mayor proyección a nivel mundial.

OBRAS DEL AUTOR

1. URBANISMO EN EL SIGLO XXI: BILBAO, MADRID, VALENCIA, BARCELONA

2. HISTORIA DE CATALUNYA AUTONOMICA (VOL. X)
de RIQUER, BORJA DE y MALUQUER DE MOTE, JORDI. Editorial: EDICIONS 62 2003.

3. HISTORIA DE LA CATALUNYA AUTONOMICA (VOL. IX)
de RIQUER, BORJA DE y MALUQUER DE MOTE, JORDI. Editorial: EDICIONS 62 2003.

4. LA CIUDAD CONQUISTADA
de BORJA, JORDI. Editorial: ALIANZA EDITORIAL, S.A. 2003

5. EL ESPACIO PUBLICO: CIUDAD Y CIUDADANIA
de BORJA, JORDI y MUXI, ZAIDA. Editorial: ELECTA 2003

ENLACES sobre LA CIUDAD

Comunicación fin de siglo

La ciudad multicultural

La multitud y la metrópoli

Ciudades latinoamericanas

La ciudad y la nueva ciudadanía

De la ciudad mediada a la ciudad virtual

La globalización en clave cultural

La ciudad de la nueva economía

Culturas urbanas de fin de siglo

Los unos y los otros en la lucha por la apropiación del espacio.

 


Juan Carlos I, un as de los negocios

Juan Carlos I, un as de los negocios


Juan Carlos I, un as de los negocios


AL MARGEN DE LA LEY.
El monarca nunca se ha visto salpicado por los escándalos que le han rodeado.




LOS INTERESES FINANCIEROS DEL JEFE DE ESTADO SE HAN VISTO ENVUELTOS EN NUMEROSAS IRREGULARIDADES

Juan Carlos I, un as de los negocios

  Kolnikov #Logomaquia:

Adviértase que lo que ocurre en esta borbónica casa, ocurre también en las demás monarquías que aún existen  en Europa. Adviertase que  son invitados y participantes a las reuniones del club Bilderberg, y adviértase que si una Monarquía como la española, contiene las características que se pueden leer más abajo, no son muy distintas, sino muy parecidas a las que quedan por Europa. 
Las Monarquías no perdieron nunca el poder, a pesar de la Revolución Francesa.
Otra cosa es que  se refugiaran y parapetaran en las democracias y parlamentos que fueron surgiendo. Un excelente caso de adaptación Darwiniana...  Dejemos los problemas  a otros, nosotros, simplemente reinemos.Somos los mejores, sin hacer nada para serlo. Nuestros hijos continuarán siendo los mejores, sin mover un dedo.
Y el pueblo llano, nos  aclamará sin motivo real (sic).













Los negocios del rey, así como su relación ‘carnal’ con la clase empresaria, contrasta con la figura mediática de “el rey de todos los españoles”.


LA FAMILIA REAL EN CIFRAS



800 millones de pesetas aumentó el presupuesto de la Casa Real entre 2002 y 2005

29 millones de pesetas fue el gasto en gasolina de la Casa Real en 1994. En 1995 el dato ya no figuraba en ese mismo informe.

1.790 millones de euros es la fortuna del rey, estimada por la revista Forbes en 2003.

6 millones de euros es lo que ha costado la nueva casa de los duques de Palma en el barrio de Los Pedralbes en Barcelona.



Decio Machado
Redacción


Con inmunidad penal ante cualquier delito y sobreprotegido como una delicada planta de invernadero, se han publicado muy pocas cosas con un mínimo de objetividad sobre el monarca y sobre sus actuaciones políticas. En el artículo 490.3 del Código Penal se puede leer: “el que calumniare o injuriare al Rey (...), será castigado con la pena de prisión de seis meses a dos años si la calumnia o injuria fueran graves, y con la de multa de seis a doce meses si no lo son”.

Esto generó procesos por injurias al rey en varias ocasiones. Los artículos y un dibujo de Jesús Zulets llevaron a la revista El Cocodrilo al banquillo en 1987. También Javier Madrazo tuvo que vérselas con la justicia por decir: “ya que le pagamos policías, yates, viajes a esquiar y a montar a caballo, no habría estado de más que, por una vez abandonase sus ocupaciones y compartiese con la sociedad su preocupación por la guerra de Iraq”; o Arnaldo Otegi, por referirse al rey como el “jefe de los torturadores”, así como Soziedad Alkohólica, Eskorbuto o Manolo Kabezabolo por el contenido de sus canciones.

A pesar del silencio mediático, la figura del rey dista mucho de ser incuestionable: desde su falta de legitimidad democrática a la construcción de su importante fortuna personal, pasando por una nunca bien aclarada actuación en el 23-F, el rey nunca ha tenido que rendir cuentas de sus acciones. La intermediación del rey en los intereses de las multinacionales españolas y de las cúpulas de la CEOE han marcado su labor como máximo representante del Estado en el exterior. Numerosos medios latinoamericanos no han dejado de denunciar sus actuaciones en beneficio del Santander Central Hispano o de Repsol en Argentina, ante la ofensiva española por hacerse con YPF.

Al mismo tiempo que la popularidad de la monarquía desciende en los sondeos, un nuevo movimiento republicano emerge con fuerza al cumplirse los 75 años de la proclamación de la II República.

Treinta años a cuerpo de rey


Las tramas financieras del monarca y el rico prosperar de su familia y de toda una subcorte que utiliza la imagen real para optimizar sus inversiones, señala a uno de los asuntos más oscuros de la Casa Real.


Se suele decir que la corte española es “una corte sin cortesanos”, y es cierto que los monarcas no han sido amigos de aliarse con la aristocracia. En su lugar han preferido empresarios, banqueros y élites del poder económico y jet set en general.

Juan Carlos I llegó al trono literalmente con lo puesto. Se dice por cronistas del momento que incluso tenía que pedir el dinero a su padre, para visitar a su novia en Atenas.

Labrándose un futuro


El comienzo de su autosuficiencia económica, se remonta a 1962 (coincidiendo con su boda con Sofía), cuando el banquero Luis Vallas Taberner comenzó a administrar una “suscripción popular” que aportaría liquidez económica a los recién casados. En aquella ‘renta básica real’ colaboraban además de otros banqueros, muchos nobles y empresarios del franquismo, según indica Patricia Sverlo (seudónimo del autor) en su libro Un rey golpe a golpe.

Otro de los que ha declarado haber hecho transferencias importantes al monarca fue Ruiz Mateos. Tras la expropiación de Rumasa, siendo prófugo de la Justicia en Londres, acusó al rey de haber aceptado “miles de millones” no solo de su propio bolsillo, sino del de diversos empresarios. El Fiscal General del Estado le acusó de un delito de injurias: lo que podría haberse convertido en un sumario comprometedor quedó reducido a nada.

En su libro El negocio de la libertad, Jesús Cacho habla de las vías de financiación personal del rey, según señala “una de las primeras formas conocidas fue el petróleo, las comisiones del crudo que importaba España para cubrir sus necesidades de energía. Nada más ocupar Juan Carlos I el trono a la muerte del dictador, Manuel Prado y Colón de Carvajal, el hombre de confianza del rey] se dedicó a remitir varias misivas reales a otros tantos monarcas reinantes, especialmente del mundo árabe, para pedirles dinero en nombre del rey de España”.

Hay constancia documental de una carta firmada por Juan Carlos I y dirigida al Sha de Persia, el 4 de julio de 1977, donde el monarca tras una descripción de la situación política dice: “me tomo la libertad, con todo respeto, de someter a tu generosa consideración la posibilidad de conceder 10 millones de dólares como tu contribución personal para el fortalecimiento de la monarquía española”. Dos años después el Sha de Persia, títere de EE UU en la zona, cayó tras la revolución islámica.


Sus buenas relaciones con los dictadores árabes también quedó patente en la respuesta favorable de la monarquía saudí a la petición de un crédito de 100 millones de dólares. Exactamente la misma cantidad pagada por la empresa kuwaití KIO a Colón de Carvajal, indica Cacho. Y prosigue: “los pagos se justificaron en Kuwait por la necesidad de que, durante la llamada ‘Tormenta del Desierto’, la aviación estadounidense pudiera disponer a su antojo de las bases aéreas españolas de Rota y Torrejón, para lo que era preciso ‘untar’ a los políticos”.

El último escándalo real llegó de Francia, donde en la instrucción del caso Elf (2003) por apropiación indebida, su ex presidente Le Floch- Prigent declaró sobre la compra de Ertoil “haber entregado 55 millones de francos en España a numerosos hombres políticos; en particular a los próximos a Felipe González y del entorno del rey Juan Carlos”, con el que Le Floch-Prigent aseguraba haberse visto en múltiples ocasiones.

Según José García Abad, autor del libro La soledad del rey:

“Felipe González hizo la vista gorda ante los negocietes y escapadas reales e incluso llegó a realizar alguna importante negociación en beneficio de la Familia Real: envió a su hombre de confianza, Julio Feo, a gestionar cerca del Gobierno griego la devolución de los bienes de la familia de doña Sofía, que habían sido confiscados cuando el rey Constantino fue destronado”.

Próximos a Juan Carlos I aparecen además nombres como Mario Conde, Alfonso Escámez, los Albertos... Destaca en sus relaciones el conocido como ‘clan de Las Cuatro Estaciones’, nombre del restaurante del que Miguel Arias, Joaquín Vázquez Alonso, Jaime Cardenal Pombo y el propio rey son socios. Algunos aparecieron implicados en la trama de Ibercorp. Entre ellos se tejió una tupida trama de negocios. Cardenal Pombo fue socio de Borja Prado (hijo de Manuel Prado) en el sector armamentístico. Este último también coparticipa, junto a su madre Paloma Eulate y la Infanta Elena en la empresa Micos Mi Primer Cole, SL. Borja Prado fue requerido como testigo por parte de la Audiencia Nacional en la instrucción del caso Banesto y se ha visto relacionado con traficantes de armas.

Joaquín Vázquez Alonso fue el constructor que remodeló en su día el Palacio de la Zarzuela, y socio de Cardenal Pombo y Arias en varios negocios inmobiliarios.

La desaparecida revista de investigación Kalegorría indicaba que próximo a este grupo estaba Francisco Sitges, ex presidente de Asturiana de Zinc y ex propietarios de los astilleros Mefasa. Esta empresa fue la encargada de construir el yate Fortuna, tras una adjudicación estatal. Sitges acabó en el banquillo de los acusados del caso Banesto.

El paraíso mallorquín

Mallorca ha sido el otro espacio de ilustres amistades del monarca, en este caso mucho más aristocráticas. Allí, el rey Juan Carlos intimó con el príncipe Zourab Tchokotua, un aristócrata georgiano que fue procesado por un juzgado mallorquín en 1978 y en 1992 en relación con presuntas estafas inmobiliarias. En la última instrucción figuraba también su socio Oliver Mateu, otro hombre cercano al rey. Según Kalegorría, el clan Mallorca se completaba con un grupo selecto de empresarios hosteleros.

El rey fue fotografiado el 7 de agosto de 1990 en Puerto Portals, junto a sus amigos Giovanni Agnelli (dueño de FIAT) y Raul Gardini, ex presidente de Montedilson, la empresa química a la cual Juan Abelló vendió su laboratorio Antibióticos con un beneficio de 450 millones de dólares. Tanto Agnelli como Gardini se vieron implicados en casos de corrupción en Italia. Este último se suicidó en 1994.

Es público que el Fortuna II fue financiado por un grupo de empresarios mallorquines, los cuales juntaron 17,5 millones de dólares para hacer el regalo real. Hoy el monarca navega en el Fortuna III, valorado en más del doble que el anterior.

Mallorca es una buena fuente de ingresos para el rey en patrocinios, ropa y equipamientos deportivos, bebidas y relojes para la familia real, convertida en un atractivo modelo publicitario a veces subliminal y otras descarado.

¿Qué dinero tiene el rey?


La partida de los Presupuestos Generales del Estado para los gastos de la Casa Real no esta sometida por ley al control del Tribunal de Cuentas. La Constitución de 1978 permite al monarca disponer de él sin dar más explicaciones. En 1980, el Gobierno le asignó 200 millones de pesetas. Hasta entonces, el rey apenas cobraba un sueldo de Capitán General. Actualmente, la partida del Presupuesto General del Estado asciende a los 7,78 millones de euros.

Debido a la opacidad de la casa real, la fortuna del rey es difícil de cuantificar. La revista Forbes (abril 2003) incluye a Juan Carlos I en el sexto lugar de los monarcas más ricos de Europa con una fortuna de 1.790 millones de euros, el puesto 134 entre los más ricos del planeta.


UNA FAMILIA COMO CUALQUIER OTRA



LA HERMANA

Pilar de Borbón y Borbón
, duquesa de Badajoz.
Presidenta y consejera delegada de Labiernag 2000 SA. Administradora única de Labiernag SL, y de San Jacobo SL, y consejera de Plus Ultra Seguros, Plus Ultra Vida, Boga SA y Vendome LG Ibéric.

EL PRIMO HERMANO

Carlos de Borbón-Dos Sicilias y Borbón-Parma, duque de Calabria.
Consejero accionista de Grupo Dragados, Inmobiliaria Urbis, Cepsa, Viajes Marsans y de Sociedad Española del Acumulador Tudor, entre otras.

LA PRIMA HERMANA

Teresa de Borbón-Dos Sicilias y Borbón-Parma Vinos, duquesa de Salermo.
Presidenta de San Dimas SL. Su hija Clara Moreno de Borbón es administradora de Salubre Consulting SL, y propietaria de Bodegas Tarsus y de Navamayor SA

EL PRIMO SEGUNDO




Alfonso de Borbón y Escasany.
Presidente de Ahorro Familiar SA. Consejero de Axa Aurora Ibérica. Presidente de Ildefonso SL y de Keka SL. Consejero delegado de Gilgamesh Inmoinversión SL, y de ZRZ SL. Preside Data Rent SA


LOS AMIGOS DE JUAN CARLOS I


Manuel Prado y Colón de Carvajal


Hay constancia documental de que “el administrador privado del rey”, Manuel Prado, utilizaba cartas con membrete real en las que pedía apoyo para determinados negocios. Hizo una fortuna a la sombra del monarca. Fue condenado por sus trapicheos con Javier de la Rosa en el caso KIO, donde recibió 100 millones de dólares del empresario catalán. Gracias a la intervención de la monarquía kuwaití, Prado logró evitar la orden de búsqueda de la Corte Comercial de Londres, ciudad donde se encuentra la sede de las operaciones internacionales de KIO. Las Cintas en posesión de De la Rosa que implicaban al rey en conversaciones telefónicas con importantes personalidades árabes, dan credibilidad a la tesis de que esos 100 millones de dólares salieron de KIO para premiar los servicios del monarca en la guerra del Golfo.

Mario Conde


Este personaje no encaja exactamente en la sección de la economía golfa. El dinero y el éxito fue fomentado como estrategia de fuerte carisma sobre la realeza. Mario Conde aspiraba a que la monarquía le diera su respaldo para alcanzar el poder político, indican varios de sus biógrafos. El que llegó a convertirse en el “banquero de la monarquía” fue una de las amistades más peligrosas del rey. Cuando Banesto fue intervenido, aparecieron al menos dos cuentas a nombre del monarca (la cuenta 8317-172 y la 148963-172) vinculadas con operaciones en Asturiana de Zinc, Sindibank, y Banesto, así como opciones para la gran ampliación de capital que no llegó a realizarse, según denuncia Ernesto Ekaizer en su libro Vendetta. Revela Jesús Cacho que fue el rey quien intercedió entre Alfonso Escámez y Gustavo Villapalos para que el banquero fuera investido doctor honoris causa. Conde fue condenado por un ‘agujero’ de 605.000 millones de pesetas y por apropiación indebida.

Marc Rich


Considerado el evasor de impuestos más importante en la historia de los EE UU. Le han calificado en diferentes medios como “el gran dragón de la corrupción”, “monsieur pétrole” o “el delincuente más inescrupuloso de la era moderna”. Cuando en 1983 se fugó de EE UU, el FBI lo perseguía por 65 delitos, como fraude, ganancias de 105 millones de dólares por venta ilícita de petróleo, simulación de precios, cotizaciones falsas y evasión fiscal por 48 millones de dólares. Rich adquirió la nacionalidad española y se estableció en Suiza. Organizó su red de empresas e hizo suculentos negocios con la mafia rusa, con Milósevic y con la Halliburton de Cheney. En 1998 fue indultado por Bill Clinton, tras financiar la campaña para senadora de Hillary. El rey Juan Carlos I figura entre los solicitantes del indulto, junto a Shabtai Shavit, ex jefe del Mossad; Camilo José Cela, ex presidente de la Fundación Marc Rich en el Estado; y por el ex vicepresidente del Real Madrid, el empresario Fernández Tapias.

El Dinero y cómo se maneja, en realidad

El Dinero y cómo se maneja, en realidad





 En el muy revelador artículo que sigue, se desvelan  misterios casi esotéricos respecto de algo tan  cotidiano como el Dinero. Y desde luego desconocidos para el común de los mortales que usan su tarjeta de crédito, y guardan el dinero en cualquier Banco.
Es curioso, yo siempre he pensado que es mejor guardarlo debajo del colchón, y después de que uno se entera de ciertas cosas,todavía más. El desconocimiento del funcionamiento del sistema bancario es uno de los logros más exitosos por parte de  quienes se encargan de gestionar esa curiosa cosa que puede valer para todo, ó no valer para nada, dependiendo de razones que escapan a los inocentes mortales que lo usan, es decir, casi toda la Humanidad. Y añado, felices y dichosos los que son capaces-que los hay- de vivir su vida sin este invento del maligno.

Kolnikov #Logomaquia



Cómo la Reserva Federal de USA y los bancos manejan el mundo

Stephen Lendman
The Rebel




Hace años leí el excelente libro de William Greider, publicado en 1987, sobre el funcionamiento del Sistema de la Reserva Federal de USA. Detallado y explícito, es una lectura maravillosa e informativa, con la excepción de la solución que sugiere para un inmenso problema.

Fue, por lejos, demasiado tímido. Este artículo propone una solución muy diferente. Greider llamó su libro “Secrets of the Temple” [Secretos del Templo] con un subtítulo: “Cómo la Reserva Federal maneja el país.” Un subtítulo mejor podría haber sido como la Fed (y muchas otras bancas centrales esenciales) manejan el mundo. Este artículo trata de resumir lo que hace, cómo lo hace, a quien beneficia y a costa de quienes. Para los que no están al tanto, prepárense para informaciones y comentarios sorprendentes.



Aclaremos algo desde el inicio:

La Reserva Federal de USA, el Banco de Inglaterra, el Banco de Japón y el Banco Central Europeo (de los 12 países europeos que adoptaron la moneda común europea en 1999) son instituciones con un poder enorme, mucho más allá de lo que puede imaginar la gente en algún sitio del mundo. Estos bancos centrales, los más dominantes de todos, así como la mayoría de los demás, tienen una poderosa influencia en las condiciones financieras en casi todos los países, incluyendo, desde luego, los suyos, en un mundo financiero con cada vez menos fronteras, en el que un evento económico importante en una nación puede afectar, para bien o para mal, a la mayoría.
Otro poderoso banco forma también parte del mundo financiero actual. Hay que mencionarlo por su importancia, aunque requiere un artículo separado para explicar de modo más completo cómo trabaja.
Es el Banco de Pagos Internacionales (BIS, por sus siglas en inglés), hermético, inviolable y sin responsabilidad ante nadie, fundado en 1930 y basado en Basilea, Suiza.
Este banco, del que la mayor parte de la gente jamás ha oído hablar, es el banco central para sus bancos centrales miembros – una especie de “mandamás de mandamases” bancario, equivalente a lo que al parecer existe en el mundo enigmático de los Dones de la Mafia.
Como la mayoría de las demás bancos centrales, incluyendo a la Reserva Federal (explicado más adelante), es de propiedad privada de sus miembros.

Algunos académicos y otros que han estudiado el BIS creen que la elite dominante del capitalismo financiero estableció este banco de bancos para que esté en la cima del poder a fin de que ejerza su autoridad sobre un sistema financiero mundial poseído y controlado por ella. Se piensa que su plan era utilizar este banco para dominar el sistema político de todos los países y controlar la economía del mundo de un modo feudal.
En una palabra, la idea es que esa súper-elite quiere regir el mundo controlando su dinero, y que estableció ese todopoderoso banco de bancos supranacional para que así lo hiciera. Por importante que sea, esa discusión quedará para otra ocasión, ya que la intención de este artículo es concentrarse sólo en la Reserva Federal de USA.

Los bancos centrales dominantes y el BIS, junto con la mayoría de los otros, ejercen su influencia en una alianza mutua de tipo cartel para asegurar que todos se beneficien más de lo que harían sino fuera por ese confortable arreglo. Con su inmenso poder no es jugar con palabras si uno dice que esas instituciones financieras ciertamente gobiernan el mundo. Porque pueden crear dinero, financian las necesidades de sus gobiernos, sus fuerzas armadas y todas las actividades empresariales, que no podrían funcionar sin un suministro expeditivo de esa mercancía, la más necesaria de todas. Es el dinero, no el amor, lo que hace que el mundo se mueva, y los banqueros centrales tienen el poder de crear o sacar de la circulación mucho o poco, según gusten y con la intención que se les ocurra. Es el tipo de poder que puede mover o destruir montañas.

Ningún banco central nacional es más poderoso en la actualidad que la Reserva Federal de USA, pero no fue siempre así, y ahora enfrenta competencia por el primer lugar, lo que no había conocido desde la Segunda Guerra Mundial. La Fed, como lo llaman, ha existido desde que fue establecido originalmente por una ley del Congreso en 1913. Pero el Banco de Inglaterra ha existido desde que Bretaña controlaba los mares, desde 1694, cuando el Rey William III necesitó ayuda para financiar el tipo de aventura que requiere mucho dinero disponible – la guerra. En aquel entonces fue contra Francia, y el rey necesitaba un banco amigo que lo imprimiera para su uso, para ayudarle a combatir. También necesitaba ayuda financiera para facilitar el comercio y administrar la deuda del país que siempre aumenta cuando se libran guerras.
El Banco de Inglaterra no fue el primer banco central, pero fue el primer banco central de propiedad privada del mundo moderno en un país poderoso. Se llamó el Banco de Inglaterra para impedir que el público supiera que, igual que nuestra Reserva Federal, era y sigue siendo de propiedad privada y no parte del gobierno. También fue el modelo utilizado en la formación de nuestro propio banco central y de la mayoría de los otros.
Los británicos podrán haber tenido una ventaja de 219 años sobre la Fed, pero los banqueros centrales sólo son tan poderosos como los países que representan y sus economías. En la actualidad los otrora dominantes británicos tienen que aceptar el papel menor de ser sólo uno de muchos socios inferiores de un hegemón USA que emergió después de la Segunda Guerra Mundial como el poder económico dominante del mundo. Siguen siéndolo hoy en día, aunque algunos expertos fiables creen que este país puede haber llegado a la cumbre y se halla en decadencia. Algunos van más lejos y afirman que nuestra decadencia ha sido acelerada por la desastrosa política del gobierno Bush que cree irracionalmente que librar la guerra sin fin contra el mundo es la manera de gobernarlo, de impulsar un crecimiento económico y una dominación sin fin, y de preservar así la posición preeminente de la nación como el campeón económico reinante.
Es fácil cuestionar este punto de vista y pensar que el campeón se ha subido al cuadrilátero algunas veces de más, tiene planes interminables de volver a repetir sus combates, y que probablemente le pasará lo mismo que a muchos personajes anteriores que no supieron cuándo abandonar y terminaron con un daño cerebral crónico, conocido como demencia. La lección de la historia es siempre la misma. El precio a pagar por una conducta imprudente es elevado, doloroso e inevitable. Vale para los países así como para los individuos, pero demasiado a menudo ni los unos ni los otros lo ven hasta que es demasiado tarde. La mayor diferencia entre USA de hoy y otras naciones del pasado que pagaron caro por no ceder cuando ya era demasiado tarde es que tenemos un arsenal todopoderoso, como los demás nunca tuvieron. Si decidiéramos utilizarlo, probablemente no quedaría gran cosa para un sucesor. No es un pensamiento agradable, pero es muy real.

Todo comenzó en 1910 en la isla Jekyll

Suena como el título de una película de horror, pero los eventos de la vida real que ocurrieron en 1910 en esta isla de propiedad privada a poca distancia de la costa de Georgia habría sido un reto hasta para la imaginación de la fábrica de pesadillas de Hollywood.

En la isla Jekyll se reunieron en secreto durante nueve días siete hombres muy acaudalados y poderosos y crearon el Sistema de la Reserva Federal que nació tres años más tarde, el 23 de diciembre de 1913 mediante una ley del Congreso. Desde entonces, la nación y el mundo nunca volvieron a ser lo mismo, sólo se beneficiaron los ricos y poderosos. De eso se trataba, y funcionó tal como lo planificaron.
La Ley de la Reserva Federal que le dio origen es seguramente una de las obras legislativas más desastrosas para el bien público que jamás haya sido producida por un organismo legislador. También puede haber sido y sigue siendo ilegal según el Artículo 1, Sección 8, de la Constitución que casualmente es la ley inviolable del país. El artículo indica que el Congreso tendrá el poder de acuñar (crear) dinero y de regular su valor. En 1935, la Corte Suprema de USA determinó que el Congreso no puede delegar constitucionalmente su poder a otro grupo u organismo. El Congreso actuó, por lo tanto, en violación de la misma Constitución que juró preservar y al hacerlo creó el Sistema de Reserva Federal que, como explicaremos más adelante, es una corporación privada con fines de beneficio que opera a costa del bien público. Mediante su acción, nuestros legisladores cometieron fraude contra el pueblo del país y hasta ahora se han salido con la suya sin que el público ni siquiera conozca el daño que se ha infligido.

El vergonzoso resultado es que lo que jamás debería haber llegado a ver la luz es ahora la institución más dominante del mundo, y todo debido a lo que comenzó en una isla de propiedad privada de nombre espeluznante. Pero, si el Congreso hubiese actuado responsablemente, la ley de creación de la Fed jamás habría sido promulgada. La legislación que la estableció fue tan dañina para el interés público, que probablemente jamás habría sido aprobada si no hubiera sido encauzada mediante una reunión del Comité Parlamentario de Conferencia organizada en plena noche entre las 1.30 y las 4.30 AM (mientras dormía la mayoría de los miembros del Congreso) el 22 de diciembre de 1913. La Ley fue votada al día siguiente y aprobada a pesar de que muchos miembros del organismo habían partido para sus vacaciones de Navidad y la mayoría de los que se quedaron no habían tenido el tiempo necesario para leerla o conocer su contenido. ¿Suena familiar? Pero la aprobaron (como un ladrón en la noche) y fue convertida en ley por un Woodrow Wilson inconsciente o cómplice, que admitió posteriormente que había cometido un terrible error, diciendo “Arruiné inconscientemente a mi país.” Pero era demasiado tarde para autopsias, y el pueblo usamericano lo ha pagado caro desde entonces. Es hora de que el público lo comprenda y comience a exigir que se termine con más de 90 años de daño.

Eso casi ocurrió hace 43 años cuando un presidente decidió actuar a favor de la gente que lo eligió. Ese hombre fue John Kennedy, quien planificó antes de su muerte el fin del Sistema de Reserva Federal para eliminar la deuda nacional que un banco central crea al imprimir dinero y prestárselo al gobierno. Esa deuda ha aumentado ahora a más de 8.400.000.000.000 dólares que tienen que ser pagados por todos los contribuyentes, quienes lo han hecho por una suma que asciende a casi 174.000.000.000 de dólares sólo en los tres primeros meses de 2006.
Este servicio de la deuda es ahora un monto anualizado que excede dos tercios de un billón de dólares. Ha enriquecido a los banqueros (de eso se trataba) y ha empobrecido al público, porque nos cobran impuestos para pagar la cuenta. No es exagerado decir que se trata del mayor fraude financiero en la historia del mundo que aumenta con cada día que pasa.


La deuda era menos onerosa hace 40 años, pero Kennedy comprendió el peligro que representaba para el país y la carga que imponía al público. Por lo tanto, el 4 de junio de 1963, dictó la orden presidencial EO 11110 dando autoridad al presidente para emitir moneda. Luego ordenó al Tesoro de USA que imprimiera 4.000 millones de dólares en “Billetes de USA” para reemplazar los de la Reserva Federal. Su intención era de reemplazarlos todos cuando hubiera suficiente cantidad de la nueva moneda en circulación para poder terminar con el Sistema de la Reserva Federal y el control que daba a los banqueros internacionales sobre el gobierno de USA y el público.
Sólo meses después de la entrada en vigencia del plan Kennedy, fue asesinado en Dallas en lo que seguramente fue un golpe de estado disfrazado para que pareciera otra cosa y que puede haber sido realizado, por lo menos en parte, para salvar el Sistema de la Fed y la concentración de poder que creó, tan beneficioso para los poderosos banqueros del país. Los que se beneficiaban tenían buenos motivos para involucrarse en la conspiración para proteger el privilegio especial al que no estaban dispuestos a renunciar sin lucha. Es una explicación plausible que podría explicar quién puede haber estado tras el asesinato y por qué motivo.

Sea cual sea la verdad, el cartel bancario sólo se vio afligido por poco tiempo. Una vez que Lyndon Johnson se hizo cargo, rescindió la orden presidencial de Kennedy y restauró el antiguo poder del cartel. Lo ha mantenido desde entonces y ahora, por cierto, es más poderoso que nunca. Ni siquiera los presidentes son capaces de detenerlo y los que quisieran tratar de hacerlo, tienen una lección que les da la historia para que reflexionen.

Los predecesores de los posibles complotadores del golpe contra Kennedy fueron los hombres que se reunieron en la isla Jekyll en 1910. Representaban a algunos de los hombres más poderosos del mundo – los Morgan, Rockefeller, Rothschild de Europa (que dominaron toda la banca europea a mediados del Siglo XIX y que todavía podrían ser la familia más rica y poderosa de todas) y otros de gran influencia y poder. Estaba también un senador de USA, un alto funcionario del Tesoro, el presidente del mayor banco del país en la época, un destacado personaje de Wall Street y el hombre que más tarde llegaría a ser el primer presidente del Sistema de la Reserva Federal. Fue una colección extraordinaria y fueron para lograr una sola cosa. Querían cambiar la ideología y el curso de los negocios usamericanos, que hasta entonces se basaban en la competencia en el mercado y reemplazarlos por el monopolio.

También sabían lo que quiso decir el barón M.A. Rothschild cuando dijo: “Denme el control sobre la moneda de una nación y no me importa quién haga sus leyes.” Conocían también la sabiduría de lo que dice en Proverbios 22:7: ““El rico se enseñorea de los pobres; y el que toma prestado es siervo del que presta”.

Fue el alba de la era de los carteles poderosos, cuando los siete titanes financieros reunidos en secreto en la casa del club de la isla

decidieron no seguir compitiendo entre ellos y exigieron el poder para arreglarlo. Ya estaban informalmente coludidos, pero sabían que todo funcionaría mejor si se realizaba bajo un cartel avalado legalmente. Querían un cartel bancario y obtuvieron uno que hoy florece por debajo del radar público con el instrumento que más deseaban – la capacidad de controlar el suministro de dinero de la nación, que les dio un poder casi ilimitado. El cartel trabaja ahora en cooperación con sus gobiernos y con todas las demás poderosas corporaciones transnacionales en una alianza global dominante que les permite controlar los mercados, los recursos, la mano de obra barata del mundo, y nuestras vidas.

El Sistema de Reserva Federal no es una agencia gubernamental – es un cartel de propiedad privada de poderosos bancos protegido por la ley.

Se cree común, pero erróneamente, que el Sistema de Reserva Federal es una función gubernamental y sometida a su control. Es falso. A menudo se habla de un banco central descentralizado, casi-gubernamental, pero es sólo una cobertura para disfrazar lo que es en realidad: un cartel de propiedad y operación privada que es presentado como si el gobierno estuviera a cargo. El hecho de que su central esté en Washington en el formidable e impresionante edificio Eccles (bautizado con el nombre de un antiguo presidente de la Fed) forma sólo parte del astuto subterfugio. Funciona como sigue:

La Fed está compuesta de un Consejo de Gobernadores en Washington y de 12 bancos regionales en las principales ciudades de todo el país (incluyendo a mi propia ciudad de Chicago donde cualquiera solía poder, pero ya no puede, ir a un cajero y comprar valores del Tesoro de USA). El sistema también incluye a numerosos y diversos bancos miembros, incluyendo a todos los bancos nacionales que tienen que formar parte del sistema. Se permite también que otros bancos se sumen y muchos lo hicieron. La Reserva Federal comenzó sus operaciones en noviembre de 1914, casi un año después de la ley parlamentaria que creó el sistema el año anterior. Recibió mandato legal para poseer el mayor poder de cualquier institución del país – el poder de crear y controlar su suministro de dinero.
La mayoría de la gente sabe poco o nada sobre el dinero y la banca, probablemente nunca piensa en el tema, y no tiene la menor idea de cómo lo que hacen la Fed y los banqueros afecta sus vidas. Antes de escribir este artículo, tenía un poco más de los modestos conocimientos que aprendí en un curso obligatorio sobre el tema y contabilidad básica como parte de mi plan de estudios para la maestría de administración empresarial, hace 46 años. Esos cursos dejaron de lado las partes más importantes de la historia y nunca dieron a entender que pudiera haber algo siniestro en el funcionamiento real del sistema bancario. Pero nadie debería imaginar que los bancos fueron establecidos para funcionar en su beneficio o que se quisiera que lo hicieran. Evidentemente no es así, y todo el que sugiriera que lo es, debería leer lo que sigue. Son tan beneficiosos para el bienestar público como lo fue el misil balístico intercontinental MX Peacekeeper (el lenguaje ingenioso es impresionante) que debía portar ojivas nucleares a mediados de los años ochenta y que tenía el poder de destruir toda vida en el planeta y que aún podría hacerlo en su forma antigua o modernizada.

La Ley de la Reserva Federal (la ley del país) estipula que los Bancos de Reserva Federal de cada región son de propiedad de sus bancos miembros. Esos bancos de la Fed son corporaciones de propiedad privada que hacen un gran esfuerzo por ocultar que ellos, en realidad, son dueños de lo que gran parte del público piensa que forma parte del tesoro y gobierno públicos. Es fácil pensarlo ya que los presidentes de la Fed y siete de los doce gobernadores son nombrados por el presidente y aprobados por el Senado. Como tal, el BRF es una especie de entidad casi-gubernamental, pero el hecho es que el Sistema es de propiedad privada con fines de beneficio privado como cualquier otra empresa. Tiene accionistas como otras corporaciones públicas, que reciben un 6% de intereses libres de riesgo cada año sobre su participación en el capital.

El público lo ignora, y probablemente no constituiría buenas relaciones públicas si lo descubriera. La gente podría molestarse aún más si supiera que algunos de los propietarios de nuestra Reserva Federal son poderosos inversionistas extranjeros en el Reino Unido, Francia, Alemana, Holanda e Italia. Son socios de gigantescos bancos de USA como JP Morgan Chase y Citibank así como de poderosas firmas de Wall Street como Goldman Sachs en un cartel banquero del nuevo orden mundial que influencia y afecta por doquier los negocios y nuestras vidas.

El problema de la propiedad privada de los bancos de la Reserva Federal ha sido cuestionado varias veces en los tribunales federales, en vano. Cada vez los tribunales confirmaron el actual sistema bajo el cual cada banco de la Reserva Federal es una corporación separada de propiedad de los bancos comerciales en su región. Un caso semejante fue el de Lewis contra USA que fue decidido por el 9º Circuito de la Corte de Apelaciones que dictaminó que los bancos de la Reserva son corporaciones independientes, de propiedad privada y controladas localmente.
L
os fundadores de la nación usamericana tenían diferentes ideas que los poderosos que se reunieron en la isla Jekyll
A través de nuestra historia, hubo desacuerdo sobre quién debía controlar el suministro de la moneda de la nación y el derecho de emitirla. Los fundadores de la nación usamericana comprendieron que el parlamento británico se vio obligado a imponer impuestos injustos a sus colonias americanas y a sus propios ciudadanos porque el Banco de Inglaterra había acumulado tanta deuda que el gobierno necesitaba ingresos para reducirla. Benjamin Franklin, de hecho, consideraba que fue la verdadera causa de la Revolución Usamericana. La mayoría de los fundadores de la nación también comprendieron el peligro que podía resultar si los banqueros acumulaban demasiada riqueza y poder. James Madison, el principal redactor de nuestra Constitución, los llamó “cambistas”, refiriéndose a la Biblia que dice que Jesús expulsó dos veces a los cambistas del Templo de Jerusalén hace 2.000 años. Madison dijo:
“La historia nos dice que los cambistas han utilizado todos los medios posibles de abuso, intriga, engaño y violencia para mantener su control sobre los gobiernos controlando el dinero y su emisión.”

Thomas Jefferson utilizó la misma energía en su condena cuando dijo:

Creo sinceramente que las instituciones bancarias son más peligrosas para nuestras libertades que los ejércitos permanentes. Ya han creado una aristocracia del dinero que ha desafiado al gobierno. El poder de emisión debería ser arrebatado a los bancos y restaurado a aquellos a los que pertenece como corresponde.”


Jefferson y Madison comprendían los peligros de los monopolios comerciales de todo tipo y trataron de asegurar que nunca existirían en la nueva nación. Ellos, de hecho, deseaban que se agregaran dos enmiendas adicionales a la “Declaración de Derechos” en la Constitución, pero nunca lo lograron. Creían que para proteger la libertad de la gente la nación debería ser “libre de monopolios en el comercio” (lo que ahora son las corporaciones gigantes incluyendo a los grandes bancos internacionales y las firmas de inversión de Wall Street) y “libre de fuerzas armadas permanentes,” o ejércitos en pie de fuerza. Tratemos de imaginar cómo sería el país en nuestros días si Jefferson y Madison lo hubieran logrado – un país sin gigantescas corporaciones depredadoras que explotan a todos para obtener beneficios y sin fuerzas armadas desenfrenadas que hacen guerra al mundo, amenazando con destruirlo, y que lo hacen para que esos gigantes corporativos puedan obtener beneficios aún mayores.

Nunca lo lograron, por cierto, y la gente lo ha pagado caro desde entonces, incluyendo el gran daño causado porque el gobierno renunció a su derecho a controlar el suministro de moneda de la nación. Lo entregó secretamente sin que el público lo supiera, ignorante del daño que se le había hecho. Ha sido peor todavía desde los años ochenta, porque el poder de la Fed aumentó bajo un presidente republicano amigo, y la algarabía dirigida por los medios corporativos ocultó el efecto. Para ellos, es inaceptable que la Fed sea degradada en público, así como sus gigantescos bancos miembros o sus aliados de Wall Street.

Las cosas se descontrolaron especialmente durante el ejercicio de Alan Greenspan. Sorprende que haya habido quien encontrara muchos motivos para elogiar a semejante presidente de la Fed antes de que dirigiera la Fed, cuando fue asesor presidencial, o durante el período en el que la dirigió. Sólo entró al servicio gubernamental después del fracaso de su firma de consultoría financiera, probablemente porque necesitaba una nueva línea de trabajo. Allí se las arregló para convertirse en un exuberante profeta de la banca central que fue casi elevado a la santidad por los expertos en los negocios que pensaron que bajo su ejercicio los cielos fueron sólo azules y que las pocas nubes a la vista siempre presagiaban que volvería a brillar el sol. Ahora Alan se retiró a los horizontes más fértiles de los contratos literarios y de las conferencias, lo que muestra que si trabajas bien para los ricos y poderosos que te lo permitieron, (a costa del resto de la gente) la recompensa final valdrá la pena. Es probable que el nuevo presidente de la Fed haya tomado nota y que tratará de continuar la tradición como corresponde.

Pero tratemos de imaginar un tipo diferente de presidente de la Fed, alguien que conociera, tuviera fe en y practicara las palabras y la sabiduría de otro presidente usamericano de cierta importancia: Abraham Lincoln.

En 1886 Lincoln dijo: “Los poderes del dinero se alimentan de la nación en tiempos de paz y conspiran contra ella en tiempos de adversidad. Son más despóticos que un monarca, más insolentes que la autocracia y más egoístas que una burocracia. Denuncian, como enemigos públicos, a todos los que cuestionen sus métodos o saquen a la luz pública sus crímenes. Tengo dos grandes enemigos: el Ejército del Sur frente a mí y los banqueros detrás. De los dos, el que está atrás es mi mayor enemigo.”

Parece que Lincoln también dijo (aunque algunos lo disputan): “Veo que se acerca en el futuro cercano una crisis que me inquieta y que me hace temblar por la seguridad de mi país… han entronizado a corporaciones y seguirá una era de corrupción en los cargos importantes, y el poder del dinero del país se esforzará por prolongar su reino utilizando los prejuicios de la gente hasta que toda la riqueza se acumule en unas pocas manos y la República sea destruida.” Imaginemos lo que Lincoln diría en nuestros días.

Lo que Lincoln pensaba sobre los banqueros y el poder del dinero en el país, parece provocar la pregunta obvia: ¿Tuvieron algo que ver, o fueron la razón de su prematura muerte a manos de John Wilkes Booth? Los banqueros internacionales detestaban evidentemente a Lincoln después de que logró que el Congreso aprobara la Ley de la Moneda de Curso Legal que autorizó al Tesoro de USA a emitir papel moneda llamado “greenbacks” [verdes]. Lincoln necesitaba esa legislación después de que renunció a pagar a los banqueros las tasas usureras de interés de entre un 24 y un 30% que exigían por los préstamos que necesitaba para financiar su guerra con el sur. Con la nueva ley bancaria, Lincoln pudo imprimir los millones de dólares necesarios, libres de deuda y de intereses. Esto no era, evidentemente, lo que deseaban los codiciosos banqueros, ya que sólo pueden sacar beneficios cuando arrebatan su trozo de carroña de las transacciones financieras que controlan. Lincoln fue asesinado poco después del fin de la guerra, y un poco más tarde rescindieron la así llamada ley “Greenback” [verde], aprobaron una nueva ley bancaria, y todo el dinero volvió a producir intereses.

Cómo funciona el Sistema de la Reserva Federal.

El Sistema de la Reserva Federal resulta de que el Congreso y el Presidente aceptaron privatizar el sistema monetario de la nación y renunciar al poder que debería hacer seguido siendo el derecho exclusivo del gobierno. Esa ley fue tan escandalosa que la Fed tuvo que ser estructurada deliberadamente para que pareciera una delegación del gobierno federal a fin de ocultar que en realidad es un cartel bancario todopoderoso de propiedad privada cuyos bancos miembros (incluyendo todos los nacionales) comparten los vastos beneficios obtenidos de poseer la licencia más importante que debiera ser exclusiva de los gobiernos– el derecho a imprimir dinero en cualquier cantidad, controlar su suministro y precio, y beneficiarse inmensamente de prestarlo a cambio de un beneficio, incluyendo al propio gobierno que debe pagar intereses por el dinero, lo que nunca sería necesario si simplemente lo imprimiera. Pensemos en lo que ocurriría si el gobierno legalizara el derecho a falsificar la moneda nacional para beneficio privado.
No es una exageración afirmar que es la mayor estafa financiera de todos los tiempos, que causa un daño incomprensible a un público que sigue sin enterarse.
Funciona como sigue:
La Fed recibió la autoridad de dirigir la política monetaria de la nación con el poder de controlar el suministro y el precio de la moneda. Tiene tres maneras de hacerlo – mediante operaciones abiertas de mercado, la tasa de referencia que cobra a los bancos miembros, y el requerimiento del porcentaje de reserva de los activos de los bancos miembros que se les exige que mantengan en su poder y no sea prestado. El Consejo de Gobernadores tiene la responsabilidad del manejo de la tasa de referencia y de los requerimientos de reserva, mientras que el Comité Federal de Mercados Abiertos (FOMC, por sus siglas en inglés) está a cargo de las operaciones de mercado abierto de compra o venta de obligaciones que explicamos más adelante. Mediante el uso de estos instrumentos, la Fed puede influenciar el suministro y la demanda de dinero y así controla directamente la tasa a corto plazo de los fondos federales que es siempre fija a menos que la Fed desee elevarla o bajarla. Las tasas a mayor plazo son controladas por los poderosos negociantes institucionales en el mercado de obligaciones.

El FOMC y cómo funciona

El Comité Federal de Mercados Abiertos es realmente la clave de todo el proceso de creación o contracción de dinero. Consiste de 12 miembros – siete miembros del Consejo de Gobernadores de la Fed, el presidente del New York Fed Bank (el más importante de todos) y cuatro de los restantes 11 presidentes del Banco de la Reserva que sirven por turnos períodos de un año.

El FOMC realiza ocho reuniones regularmente programadas por año para evaluar las condiciones económicas y decidir lo holgada o estricta que ha de ser la política monetaria para impulsar su objetivo declarado de un crecimiento económico sostenible y de estabilidad de los precios.
Literalmente, el FOMC tiene el poder de crear dinero de la nada. Lo hace mediante un proceso de cuatro etapas:


Primera etapa: El FOMC aprueba la compra de obligaciones del gobierno de USA en el mercado abierto.

Segunda etapa: El New York Fed Bank adquiere las obligaciones a los vendedores (los mercados financieros siempre tienen un número idéntico de compradores y vendedores).

Tercera etapa: La Fed paga por sus compras con créditos electrónicos a los bancos vendedores que, por su parte, acreditan las cuentas bancarias de los vendedores. Estos créditos son literalmente creados de la nada.

Cuarta etapa: Los bancos que reciben los créditos pueden entonces utilizarlos como reservas para posibilitar que presten hasta 10 veces su suma (si su requerimiento de reserva es de un 10%) mediante la magia (que sólo poseen los bancos) de la banca de reserva fraccional y, por cierto, cobran intereses por el total. ¡Qué negocio! y todo es legal. Imaginemos cuán ricos podríamos ser todos si pudiésemos hacer lo mismo como individuos privados:

Pedimos prestado un millón a la Fed, como por arte de magia lo multiplicamos por 10, y cobramos intereses sobre el total, con la excepción de un 10% que debemos mantener en reserva. Es la magia de la creación de dinero de la reserva fraccional y explica cuán poderoso es el estímulo económico cuando la Fed quiere realzar el crecimiento económico.
Cuando la Fed desea contraer la economía reduciendo el suministro de dinero, simplemente invierte el proceso mencionado. En lugar de comprar obligaciones, las vende de manera que el dinero sale de las cuentas de los bancos compradores en lugar de ingresar en ellas. Entonces, los préstamos bancarios tienen que ser reducidos 10 veces si el requerimiento de reserva es de un 10%.


Cómo la Fed daña el interés público

El sistema de la Reserva Federal existe sólo para servir a sus propietarios y a los bancos miembros y al hacerlo es hostil al interés público. Eso, porque es un cartel bancario con el poder de restringir la competencia por mayores beneficios obtenidos a nuestra costa. Sale de nuestros bolsillos, a los de ellos, y el público pierde de cuatro maneras:

Primera:
A través del impuesto invisible de la inflación que resulta de la dilución del poder adquisitivo causado por el ingreso al sistema de dinero recién creado, lo que reduce el valor de los dólares que ya están presentes. La Fed de Greenspan fue especialmente expansiva, nunca fue responsabilizada por sus excesos y pudo legar el serio problema que creó a un futuro presidente de la Fed y a la sociedad, para que lo encararan. El hombre al que ahora ensalzamos como mago monetario comenzó de modo sensato. Desde 1982, antes de que llegara en 1987, hasta 1992, el suministro de dinero aumentó en un promedio de un 8% por año. Pero de 1992 a 2002, las imprentas trabajaron horas extra en sincronización con la desregulación y el crecimiento de los mercados globales, expandiendo la moneda en más de un 12% por año. Se hizo aún más extremo después del 11-S y desde 2002 creció a una tasa de un 15%. Ahora se ha más que duplicado en menos de una década. Parece que el nuevo presidente de la Fed tomó nota y ha comenzado a reducir el ritmo de expansión monetaria ya que sigue aumentando la tasa de los fondos federales a cualquier nivel que tenga en mente.

Los operadores cambiarios también parecen haber tomado nota del ritmo de la expansión general del suministro de dinero. Con la excepción de un descanso en 2005, es bastante probable que la debilidad del dólar desde 2002 sea el resultado del exceso creado por los gastos derrochadores del gobierno de Bush para financiar sus interminables guerras y sus insensatos recortes tributarios para los ricos. El problema se complica aún más ya que desde 1964 hasta la actualidad, el servicio de la deuda ha crecido de un 9 a un 16,5% del presupuesto federal, y sigue aumentando, y el actual déficit ha pasado de un superávit de un 1% a casi un 7% de déficit; el endeudamiento federal ha crecido en un 40% sólo desde 2001 y ha sido financiado en gran parte por “la gentileza de extranjeros” que podrían estar perdiendo los nervios. Además, desde marzo de 2006, la Fed dejó de publicar la suma M-3 del monto total de dólares en circulación.
Sin esa transparencia, ahora los grandes compradores de obligaciones del Tesoro de USA tienen que calcular el valor del dólar basándose en la especulación y la inseguridad en lugar de datos seguros – no es algo que inspire confianza en los mercados financieros que funcionan mejor en una atmósfera de franqueza y claridad.

Segunda:
El público también pierde porque el cartel bancario puede practicar la usura – por su poder sobre una moneda flexible para aumentar o bajar artificialmente las tasas a cualquier nivel que escoja lo que muchos pequeños prestamistas no pueden hacer en un mercado verdaderamente libre y abierto. Además, la dominación sobre el mercado por el cartel fuerza a la mayoría de los prestatarios (especialmente los más pequeños que están en menos condiciones de emitir sus propios instrumentos de deuda) a pedirle préstamos que luego puede hacer utilizando lo que debería ser el dinero de la gente, puesto a su disposición al coste más bajo posible por numerosos pequeños prestamistas fuertemente regulados por el gobierno, que competirían en busca de clientes.

Tercera:
Mediante los impuestos, nosotros, el público, tenemos que pagar para cubrir los intereses de la inmensa deuda nacional (actualmente de más de 8,4 billones de dólares) acumulada del dinero imprimido por la Fed y prestado al gobierno. Como dijera anteriormente, totaliza ahora un monto anualizado que excede dos tercios de un billón de dólares y aumenta a diario. Ha enriquecido a los banqueros, empobrecido a la gente de a pie, y el público todavía no se entera de que está siendo esquilmado en grande.

Cuarta:

Exacerbando el abuso mencionado, el cartel puede hacer que el público saque de apuros al sistema con más dólares del contribuyente. Esto sucede cada vez que alguno de los bancos demasiado grandes para que se permita que fracasen necesita ayuda financiera para sobrevivir. Lo mismo vale para grandes corporaciones como Chrysler o Lockheed, grandes firmas inversionistas o fondos hedge como Long-Term Capital Management o incluso países como México. También vale cuando cierra un solo banco y hay que compensar a los depositantes o, de modo más serio, después de una crisis financiera sistémica como la que acabó con muchos bancos de ahorros y préstamos en los años ochenta. Sea un solo banco o muchas docenas al mismo tiempo, los dólares tributarios del público son utilizados para salvar el sistema o sólo para pagar la cuenta a fin de rembolsar a depositantes asegurados contra pérdidas por el seguro de protección gubernamental hasta un cierto monto por cuenta.

¿Cómo habría reaccionado Adam Smith ante el Sistema de la Reserva Federal?

Esta concentración de riqueza y poder del cartel bancario es lo contrario de lo que Adam Smith, el padrino ideológico del capitalismo de libre mercado, propugnó en sus escritos, incluyendo su obra fundamental “La Riqueza de las Naciones”.
Smith escribió sobre una “mano invisible” que dijo funcionaba mejor en un mercado libre con numerosos pequeños negocios en competencia local los unos contra los otros. Se opuso enérgicamente al mercantilismo concentrado de su época (lo que haya sido) que actualmente sería el equivalente de nuestras gigantescas corporaciones transnacionales y el cartel bancario con el poder para restringir la competencia, mantener precios más elevados de lo que hubiera sido posible de otro modo y, como resultado, ganar mayores beneficios a expensas del público.

El tipo de cartel bancario que existe hoy en día es precisamente lo que Smith habría condenado. Pero que haya un banco central no es un mal de por sí siempre que el banco sea de propiedad del gobierno, controlado y operado en función del bien público. Sólo aparece un problema cuando establecen el banco mediante subterfugios para que parezca como si fuera de propiedad del gobierno y operado por éste, cuando en realidad, funciona en función del interés privado como en nuestro caso y también en la mayoría de los otros. Y en USA, para que funcione el amaño, el Sistema es dirigido por un organismo rector nombrado en su mayoría por el gobierno, que actúa como un alcahuete para los miembros privados del codicioso cartel de la banca que fue el primero en desear que existiera y que logró que un Congreso corrupto lo pusiera a su disposición.
Para que funcione, el cartel precisa de la cobertura que consigue como resultado de su asociación con el gobierno, pero perjudica al interés público gracias a esa estructura en provecho de sus propias ganancias privadas.
Y así llegamos al quid del problema:
El Congreso elegido para servir al pueblo, lo traicionó en lugar de cumplir con su deber al crear un cartel bancario todopoderoso y otorgarle la autoridad para practicar la banca de reserva fraccional con el poder de obtener dinero libre creándolo de la nada.


Luego permitió a sus miembros un derecho de casi-monopolio para establecer las tasas de interés que deseen cobrar a los prestatarios.
Todo el proceso equivale a un atraco legalmente sancionado por parte de los poderosos bancos que operan confabulados con el gobierno para obtener sus propios beneficios. Forma también parte de un proceso más amplio organizado por el gobierno para transferir riqueza del pueblo a los bolsillos de las grandes corporaciones y de los ricos, y lo hace mientras los afectados desconocen que siquiera ocurre.

El Sistema de Reserva Federal también daña al público de otra manera:


La Fed daña el bien público de otra manera importante, y de nuevo la mayoría de la gente no tiene la menor idea. El Sistema de Reserva Federal fue supuestamente establecido para estabilizar la economía, limar asperezas de los ciclos de la coyuntura, mantener una tasa saludable de crecimiento sustentable mientras conserva la estabilidad de los precios y beneficia a todos. ¿Ha hecho bien su trabajo?

Desde su creación en 1913, hemos tenido los cracks de 1921 y el más importante y recordado de 1929. Fue seguido por la Gran Depresión que duró hasta el comienzo de la Segunda Guerra Mundial, la que según el destacado economista conservador Milton Friedman fue causada y exacerbada porque la Reserva Federal decidió sorprendentemente la reducción del suministro de dinero en tiempos de contracción económica, en lugar de aumentarlo.

Luego tuvimos recesiones en 1953, 1957, 1969, 1975, 1981, 1990 y 2001. También tuvimos comienzos de inflación en los años sesenta. Ésta fue bastante severa durante gran parte de los años setenta y a comienzos de los ochenta. Y tuvimos una importante crisis bancaria en los años ochenta en la que quebraron más bancos y asociaciones de ahorro y préstamos que nunca antes en nuestra historia. Sucedió después de la desregulación del mercado financiero, al permitirse que los bancos persiguieran sus propios intereses sin supervisión gubernamental que controlara su inclinación a correr riesgos excesivos o que impidiera que trataran de salirse con la suya mediante fraudes deliberados.

Junto con la estabilidad económica que la Fed nunca logró, también se ha disparado la deuda de los consumidores; déficits presupuestarios y comerciales de nivel récord; una cantidad elevada de bancarrotas personales y crecientes delitos con préstamos hipotecarios; un interés sobre una creciente deuda nacional que representa un porcentaje grande y creciente del presupuesto federal; la pérdida de nuestra base manufacturera y de puestos de trabajo con salarios elevados porque son exportados a países de baja remuneración; una economía en la que los servicios acaparan ahora cerca de un 80% de todos los negocios que en su mayoría pagan mal, con trabajos menos capacitados con poca o ninguna prestación; y una brecha en el aumento de los ingresos y la riqueza que sigue dañando a las personas de bajos o medianos ingresos para beneficiar a los pocos ricos y acomodados, así como un gobierno que impulsa esta situación.
Todo se sintetiza en una conclusión:
La Fed no cumplió, por sobre todo, la tarea esencial para la que fue establecida para comenzar. Pero es mucho peor todavía, si comprendemos los verdaderos motivos de un cartel. No es servir el interés público. Es abusar de él, porque así aumentan los beneficios. Puede hacerlo con la concentración de su poder, legalmente sancionado, y un gobierno amigo aliado con sus socios o facilitadores. Se sale con la suya cuando comete los más espléndidos de los robos gracias a este amaño oculto de la vista del público.

Una solución necesaria para un problema inmenso.


Se desprende de la información presentada que el Sistema de la Reserva Federal fue establecido mediante el sigilo y el engaño por un puñado de políticos corruptos al servicio de sus poderosos aliados de la banca y de Wall Street. Lo hicieron para defraudar al público y sin que éste haya tenido la menor idea de lo que sucedía, y de lo dañino que era para su bienestar e interés. Los que estaban en el Congreso y el presidente Wilson (un hombre formado en derecho, ex abogado practicante, antiguo académico apreciado y presidente de la Universidad Princeton) o sabían o deberían haber sabido que la ley que él y ellos aprobaron al establecer la Fed estaba en violación directa de la Constitución que habían jurado defender. No lo hicieron, y violaron la ley, y el público pagó caro su crimen desde entonces hasta la actualidad.

De manera que, ¿qué recurso queda, y es posible movilizar a la gente para darle seguimiento? Hay una sola solución sensata y justa para deshacer el daño que se ha hecho a tantos durante tanto tiempo: abolir el Sistema de la Reserva Federal y restaurar el poder que tiene actualmente a un Gobierno Federal que trabaje por el bien público. Recuperarlo del poderoso cartel bancario que trabaja en su contra y no volver a permitir jamás que vuelva a caer en sus manos. Es el único camino. El gran poeta y dramaturgo alemán Bertolt Brecht habría estado de acuerdo cuando dijo que “es más fácil robar estableciendo un banco que asaltarlo.”

La liberación del poder de esos poderosos “cambistas” traería enormes beneficios para todos. Establecería una política prudente de creación de dinero que minimizaría nuestro impuesto más injusto – la inflación que es causada por banqueros privados en busca de beneficios que manipulan el suministro de dinero de la nación para aumentarlos. Estabilizaría la economía y suavizaría los extremos en el ciclo de la coyuntura agudizados por el cartel que trabaja para su propio beneficio y contra el nuestro. Reduciría el coste del dinero para los prestatarios porque terminaría con el poder monopolista que tiene actualmente el cartel de establecer las tasas que prefiere, abriendo el mercado a más competencia.

Reduciría la creciente y opresora deuda nacional al ser por fin liberada del aumento del suministro de dinero requerido para pagarla.

Reduciría la carga tributaria para el público ya que se necesitarían menos ingresos para el servicio de la deuda. Sería un paso trascendental hacia la reducción del poder abrumador de todos los gigantes corporativos depredadores que nos explotan para poder crecer y prosperar, y ojalá termine por eliminarlo. Podría incluso servir de disuasión para evitar guerras que sólo se libran para obtener riqueza y poder – nunca por la gloria o para que el mundo sea más seguro para la democracia u otros motivos falsos. Sin un poderoso cartel bancario y otros gigantes de la industria que viven de la miseria humana que generan, habría menos necesidad de guerra alguna.

Tratemos de imaginar ese tipo de mundo y un gobierno que trabaje por el bien público en lugar de dañarlo como lo hace ahora para servir al capital.

Ese mundo es posible, y la gente responsable tiene que trabajar por él, porque el que tenemos actualmente ha fracasado y debe ser cambiado antes de que sea demasiado tarde.

Una visión del mundo creada por los intereses del capital y por nuestro gobierno que lo apoya.

En el inquietante, corrupto mundo del capitalismo neoliberal de “libre mercado” controlado por gigantescas corporaciones; que beneficia sólo a los pocos privilegiados y causa tanta miseria y desesperación; un mundo despótico que no puede durar, ni debemos permitir que dure mucho más; en el que interminables guerras por el poder y los beneficios; en el que la gente es una mercancía utilizada según se la necesita y descartada como basura cuando no es así; sin preocupación por la preservación de una ecología capaz de sustentarnos, que no lo seguirá haciendo por mucho tiempo más porque la estamos destruyendo, y a nosotros mismos, por ganancias; en el que las necesidades humanas básicas no tienen importancia bajo un modelo económico en el que sólo vale el beneficio privado; en el que la democracia es incompatible con el capitalismo depredador; en el que nadie debiera querer vivir o tener que hacerlo; en el que debemos cambiar o morir. En el lenguaje del capital, es el balance final. Sólo un movimiento de masas de gente comprometida puede cambiar el mundo. Debe acabar o acabaremos todos.


A menos que podamos pasar de nuestro modelo económico fracasado a una alternativa mejor, terminará cuando le llegue el día de una u otra manera. Pero podría ser un desenlace que nadie puede desear – su autodestrucción que se lleve todo consigo, sea por un holocausto nuclear o por un medio ambiente tan inhóspito que no permita que vivamos en él. Nuestra única posibilidad es trabajar por el cambio mientras quede tiempo.

Una visión de un mundo diferente


La historia prueba que un mundo mejor es posible cuando hay gente comprometida que trabaja lo suficiente para lograrlo. Así terminó la esclavitud; los trabajadores conquistaron el derecho a organizarse y a la negociación colectiva; las mujeres lograron el mismo derecho a voto que los hombres, el control sobre sus propios cuerpos, y más derecho y condición en la fuerza laboral; los negros y otras minorías obtuvieron importantes derechos cívicos; y los políticos estatuyeron importantes leyes sociales aunque haya sido sólo por temor a lo que podría suceder si no lo hacían.

Thomas Jefferson explicó que “el precio de la libertad es la vigilancia eterna.” Es el mismo precio a pagar para mantener nuestras conquistas sociales logradas con tanta dificultad. En la generación pasada esas conquistas se erosionaron mientras no prestábamos atención y sólo una acción de masas del pueblo puede rescatarlas. El objetivo debería ser un mundo humanitario de participación en el que las vidas de la gente mejoran porque todos trabajamos juntos para lograrlo; un mundo de paz y no de guerras interminables en beneficio de los ricos y poderosos a nuestras expensas; en el que todas las necesidades humanas esenciales son satisfechas porque los gobiernos trabajan por el bien común para asegurarlo; con una democracia participativa real en la que los funcionarios públicos y elegidos trabajan juntos para mantenerla fuerte y vibrante; sin gigantes opresores corporativos o carteles bancarios porque la ley no los permite; en el que la nutrición ecológica y la preservación constituyan una preocupación central; en el que haya aire, agua, suelos puros y una alimentación adecuada y segura; un mundo mucho más simple, con una base más local que la actual, en la que nociones como la globalización ni siquiera formen parte del vocabulario; un mundo basado en la equidad social y la justicia para todos, con gobiernos, el mantenimiento del orden y los tribunales trabajando para asegurar que siga siendo así; un mundo en el que todos queramos vivir y ojalá algún día lo podamos; un mundo que queramos legar a futuras generaciones; un mundo que no podamos dejar de lograr porque la alternativa puede ser la nada.

Puede que nos encontremos en un momento crucial en el que nuestro destino está en juego. O trabajamos juntos por un mundo mejor, sustentable o probablemente nos convertiremos en la primera especie que se autodestruye. Si sucede, probablemente nos llevaremos a la mayoría de las demás con nosotros y no dejaremos gran cosa para los pocos que queden. Ya no nos queda el lujo de discutir el tipo de mundo que necesitamos para sobrevivir. Los bancos gigantes y las corporaciones no nos lo brindarán, ni lo hará un gobierno hostil aliado con ellos. Depende de nosotros que lo logremos o probablemente sucumbiremos si fracasamos. Sería un buen comienzo si expulsáramos de nuestro templo a los “cambistas” de la Reserva Federal y con ellos a las corporaciones gigantes. Un mundo mejor es posible si recordamos y vivimos según las palabras inspiradoras de Antonio Gramsci sobre “el optimismo de la voluntad.” Con su ayuda, el pueblo organizado puede encontrar un camino para derrotar al dinero organizado.



Stephen Lendman vive en Chicago. Para contactos: lendmanstephen@sbcglobal.net

http://www.therebel.org/index.php?name=News&file=article&sid=6353

Germán Leyens es miembro de los colectivos de Rebelión y Tlaxcala (www.tlaxcala.es), la red de traductores por la diversidad lingüística. Esta traducción es copyleft.



Rebajas de Impuestos

Ante la reforma fiscal del PSOE
¿Impuestos?
Sí, gracias
Aurora Martínez Hernández
Profesora de Economía de Bachillerato, Attac Madrid

En este artículo, muy didáctico, Aurora Martínz, defiende el argumento de que un sistema fiscal progresivo es un elemento esencial de la democracia y del bienestar social, donde todos contribuirán al sostenimiento de los gastos públicos de acuerdo con su capacidad económica. El artículo hace una breve exposición de los tipos de impuestos y pasa a explicar los aspectos positivos de los impuestos. Un poco más adelante hace un crítica razonada imperdible de los argumentos de los partidarios de las rebajas de impuestos:



INTRODUCCIÓN
Hace 30 años Hacienda éramos todos y no había partido político en España que se atreviera a criticar los impuestos. Hoy se han extendido por todo el mundo las ideas neoliberales que apuestan por la bajada de los impuestos directos y progresivos. Además se ha extendido la permisividad hacia el fraude fiscal dentro del país y fuera en los llamados paraísos fiscales, donde los no residentes pueden crear bancos o sociedades financieras en condiciones privilegiadas de anonimato y escasa o nula imposición fiscal. Es necesario un aumento de funcionarios de la Inspección de Hacienda que permita reducir el fraude al mínimo y un avance de la progresividad, sin que ello suponga perder competitividad, que pague más la mayoría o que los ciudadanos dejen de contribuir, aunque poco, en nuestro sistema fiscal para lograr una mayor igualdad y participación social


A. LOS INGRESOS DEL ESTADO: CONCEPTO DE TRIBUTO E IMPUESTO.
Los impuestos son la forma principal de ingresos en el sector público. En la Unión Europea de los quince los impuestos son aproximadamente el 85% de sus ingresos y representan el 42% del PIB frente al 36% que representa la presión fiscal en España. En EEUU y para el año 2004 los impuestos representaban el 16,3%, frente al 21% en el 2000.

Los impuestos tienen dos funciones: una función recaudatoria, para financiar los servicios públicos y una función redistributiva de la riqueza, que busca una mayor igualdad que mejore la justicia, la cohesión y la paz social.

El impuesto es el principal tributo. El tributo se define como el pago que de forma coactiva se hace a favor del estado con el fin de que éste pueda recaudar los recursos que necesita para cumplir sus fines. Otra clase de tributo es la tasa. La tasa se paga por usar un bien público o recibir un servicio público, como la que se paga por el carnet de identidad o por entrar a un museo.
El impuesto lo definiremos como el tributo que se paga sin recibir contraprestación por haberse realizado el “hecho imponible” que está previsto en la ley de cada tributo. Así el hecho imponible IRPF es la obtención de renta por una persona física; el hecho imponible del Impuesto de Sociedades es la obtención de beneficio por parte de las sociedades.

A.1. CLASES DE IMPUESTOS.
En una primera clasificación distinguiremos entre:

Impuestos directos, que gravan o recaen sobre la riqueza: renta y/o patrimonio.
Impuesto indirectos, que gravan el consumo o las ventas. Lo pagan todos por igual.

También podemos distinguir entre:
Impuesto progresivo, cuando los contribuyentes con mayores rentas o patrimonio pagan en mayor proporción que los que los que tienen menos rentas o patrimonio. El impuesto progresivo por antonomasia ha sido el IRPF.
Impuesto proporcional, cuando se paga en proporción al valor de la compra como el IVA o al beneficio como en el impuesto de sociedades.

B. ASPECTOS POSITIVOS DE LOS IMPUESTOS
1. Son éticamente buenos por su doble finalidad: redistribuir la riqueza y la renta y conseguir la recaudación que el estado necesita.
2. Crean empleo de calidad y aumentan la renta del país. Por el efecto del multiplicador del gasto público, el dinero empleado en el gasto público produce un aumento de la renta que es múltiplo de lo gastado.
3. Es la fuente de la inversión pública, necesaria para la salud y bienestar de los ciudadanos y que en muchas ocasiones el sector privado no realiza porque no da beneficios: educación, sanidad, infraestructuras...
4. Sirven para mitigar los efectos nocivos del mercado, al subsanar la mala distribución de la renta que éste produce o al contribuir que los precios de determinados servicios privados, que se prestan también por el estado, no se disparen, como ocurre con los precios de la sanidad privada y no ocurre con los dentistas.
5. Pueden utilizarse para encauzar el sistema financiero internacional y evitar las crisis financieras, por ejemplo con un impuesto tipo Tobin, que gravaría la compra-venta de divisas.
6. Evitan consumos perjudiciales, tales como los del tabaco o el alcohol o determinadas prácticas que destruyen el medio ambiente, con los impuestos ecológicos.

El artículo 31 de la constitución española proclama que “ Todos contribuirán al sostenimiento de los gastos públicos de acuerdo con su capacidad económica mediante un sistema tributario justo inspirado en los principios de igualdad y progresividad que en ningún caso tengan carácter confiscatorio”.


C. ARGUMENTOS ECONÓMICOS DE LOS QUE QUIEREN BAJAR LOS IMPUESTOS Y SU CRÍTICA.
Los argumentos y teorías de carácter económico suelen ser, en muchos casos, interesados porque las decisiones económicas afectan y son afectadas por muchas variables y hacer depender el resultado de una o pocas de estas variables está lejos de la realidad. Tampoco el carácter predictivo que se les exige para tener la categoría de científicas en la mayoría de los casos se cumple.

Los argumentos más usuales de carácter económico son:

1. Si se reducen los impuestos directos y en concreto los del capital, los propietarios de grandes fortunas y empresas dispondrán de más dinero para ahorrar lo que permitirá que también aumente la “inversión” y con ella la renta del país.
- Crítica. El aumento del ahorro no supone siempre la subida de la inversión productiva que es la que puede hacer subir la renta del país porque los que ahorran y los que invierten no son siempre los mismos ni tienen las mismas motivaciones. Además en la mayoría de los casos las inversiones que se realizan son especulativas. Tampoco crean más y mejor empleo o se utiliza para comprar maquinaria que ahorra puestos de trabajo o para prejubilaciones. En EEUU durante la década de crecimiento de los 90 el ahorro estuvo bajando año a año. Bajar los impuestos a los ricos no es mejor camino para desarrollar un país. ¿ No sería mejor que el dinero de los impuestos lo invierta el estado que esa es su función y pueden de alguna manera ser controlado por los ciudadanos? Además se puede invertir con ahorro exterior o mandar el ahorro a otros países.

2. Cuando se bajan los impuestos, los consumidores tendrán más renta disponible y aumentará el consumo por lo que las empresas podrán producir más y contratar más trabajadores y la renta del país aumentará.
-
Crítica. El aumento del consumo y del PIB, que valora por ejemplo la publicidad y la fabricación de armas y no valora los trabajos del hogar, del voluntariado o el ocio entre particulares, no es una buena medida del bienestar. Sin embargo el gasto público que realizaría el estado con los impuestos produce un aumento de bienes y servicios públicos que van destinados a dar mayor calidad de vida a la población y aumentan la renta del país en mayor proporción.

3. Si no se bajan los impuestos habrá un. “Golpe al principal incentivo para atraer multinacionales” (Titular primera página de Expansión ,5 de abril de 2006), que sigue: “La deslocalización industrial forma parte del deterioro competitivo de España. No podemos evitar la deslocalización, que es una opción legítima....Hay que incentivar la entrada de empresas...rebajando la fiscalidad...”.
-
Crítica. Hay que deshacer el mito de la necesidad ineludible de las multinacionales, en muchos casos de actividades especulativas, y de que nosotros mismos no podemos producir la mayor parte de lo que necesitamos. Lo que hace falta es voluntad firme de instituciones, sindicatos y sociedad civil de encontrar soluciones, como comprar español o boicotear los productos de las compañías que dejan el país, por ejemplo.
Y respecto a nuestra baja competitividad se puede mejorar tanto rebajando los beneficios de las empresas como con actuaciones del Tribunal de Defensa de la Competencia. Tenemos en España legiones de jóvenes dispuestos a crear empresas con unos márgenes de beneficios inferiores a los de algunas empresas grandes.


C.1. ARGUMENTOS “ÉTICOS” QUE UTILIZAN LOS QUE QUIEREN BAJAR LOS IMPUESTOS.
1. Los ingresos de los ciudadanos son debidos a su esfuerzo, a su preparación o a su capacidad y el estado al recaudar impuestos les está robando.
- Crítica. Los ingresos que recibe una persona no sólo dependen de su esfuerzo realizado sino del desarrollo tecnológico y cultural que haya alcanzado la sociedad en la que vive, en la que han participado con su esfuerzo muchas generaciones. Por lo tanto, los que pagan impuestos devuelven a la sociedad una parte de lo que han obtenido por el uso de ese patrimonio social.

2. El Estado, al recaudar los impuestos se entromete en la vida de los ciudadanos y les coarta su libertad.
- Critica. Según Victoria Camps ( El País) el concepto liberal de libertad( uno es libre mientras nadie le impida hacer lo que quiere) es la causa de la extensión del individualismo (egoísmo) actual y "ha pervertido el sentido de la democracia que no es otro que el autogobierno, la participación y la cooperación."
Félix Ovejero considera que "el dinero es una suerte de licencia para actuar que nos permite eliminar muchas de las prohibiciones que nos limitan nuestras acciones y cuando se redistribuye riqueza se iguala el acceso a la libertad del ciudadano" ( El País, 24, 5 2006).
José Luis Sampedro, en su libro “ El mercado y la globalización” nos invita a entrar a un mercado sin dinero: “Constatará en el acto que sin dinero allí no hay libertad”


D. RAZONES EN CONTRA DE LA REFORMA FISCAL DEL PSOE Y PROPUESTAS.
El PSOE ha presentado al parlamento dos proyectos de ley: el proyecto de Ley de Medidas de Prevención del Fraude y el proyecto de Ley sobre el IRPF y de la modificación parcial del Impuesto de Sociedades.
Respecto al Proyecto de Medidas de Prevención del fraude considerar que la lucha contra el fraude debe ser en este momento el objetivo prioritario que se debe alcanzar con la actual reforma fiscal por el volumen de dinero que se está dejando de ingresar en las arcas públicas, muy superior a las perdidas de ingresos que va a provocar la reforma del IRPF y del Impuesto de Sociedades.

Las medidas que se enuncian en el proyecto de ley destinadas a atajar el fraude están dirigidas sobre todo a las siguientes bolsas de fraude: trabajo sumergido ( 23% del PIB), fraude inmobiliario, fraude del IVA, paraísos fiscales, fraude de empresarios y profesionales que utilizan la estimación objetiva (por superficie, número de trabajadores kilovatios... para calcular el beneficio).
Estas medidas pueden valer para reducir el fraude,aunque si ni hay gran aumento del presupuesto para el personal inspector esta reforma será inútil. Obtener 100 euros de ingresos por fraude requiere sólo unos gastos de personal inspector de 0,7 euros.
La segunda crítica importante a este proyecto es que no ha aumentado a cinco años el plazo de prescripción de las deudas con hacienda, con lo que un volumen importante de infracciones se quedan sin cobrar.

Respecto del segundo proyecto de ley del IRPF no estamos de acuerdo con esta reforma, entre otros, por los siguientes motivos:

1. El PSOE no ha sido congruente con las críticas que en su día hizo al PP cuando este presentó su reforma: “Bajar los impuestos a los ricos no es de izquierdas”.
2. Se habla de los principios orientadores de la productividad, y del crecimiento “sostenido” y no de desarrollo sostenible. Pero crecer no es sinónimo de bienestar general para generaciones presentes y futuras. También se habla de equidad y suficiencia que no deja de ser palabrería barata porque la equidad requiere cambios profundos en la propiedad de la riqueza.
3. Esta reforma va a suponer, según fuentes del gobierno, dejar de ingresar 4000 millones de euros lo que va a impedir financiar correctamente necesidades prometidas y no prometidas y necesarias Ley de la Dependencia, jubilaciones...
4. Se siguen manteniendo los incentivos fiscales para los fondos de pensiones, medida doblemente perversa: rebaja los impuestos a los perceptores de rentas altas y por lo que representan. Estos fondos junto con los de inversión y los de las compañías de seguros suponen un monto aproximado del PIB mundial y el Banco Mundial ha presionado a los gobiernos a establecer sistemas de jubilación privados. Pues bien, estos fondos por el volumen que representan tienen un poder económico que les permite imponer sus intereses a los gobiernos y empresas que los utilizan y pueden crear una crisis financiera en un país si deciden irse de golpe.
5. Esta reforma es regresiva pues sigue beneficiando a las rentas más altas, las del capital, que ahora se llaman de ahorro (plusvalías, planes de pensiones e inversión, seguros, cuentas..) y a gran parte de los pequeños empresarios pues tributan a un tipo menor que las rentas del trabajo.

La reforma del Impuesto de Sociedades supone una bajada de los tipos máximos del 35% al 30% para las grandes empresas y del 30 % al 25% para las pequeñas se va a realizar sin el compromiso de creación de empleo de calidad.


E. PRINCIPIOS DE MORAL FISCAL Y CONCLUSIONES.
Atendiendo a un documento de Justicia y Paz del año 1990 consideramos:

1. Que en las sociedades democráticas los impuestos tradicionalmente han cumplido tres condiciones para ser justos: son establecidos por el parlamento, demandan más proporción de los que más tienen y deben ser suficientes para las necesidades comunes.
2. Que la ocultación fraudulenta de rentas para eludir a Hacienda constituye una actitud inmoral, egoísta, éticamente insolidaria.
3. Que es necesario promover un estado de opinión social a favor de la justicia distributiva, especialmente con debates.
4. Que la conciencia moral fiscal nos debe mover a la acción para exigir al gobierno que realice los cambios necesarios para que la reforma fiscal que se apruebe sea justa y progresiva.

Los dogmas neoliberales

 

Rebajas de impuestos y Desigualdad

 Davius # Colectivo Logomaquia


En una conferencia, en Ciudad de México, Paul Krugman explicaba que la historia de las políticas económicas estaba dominada por una serie de "modas", que constituyen el "saber convencional" (conventional wisdom) del momento[1]. Esa moda o "saber convencional" del momento es casi siempre un principio de dogmas parcialmente incoherentes, adoptados como credo de los gobernantes, que raramente se apoyan en la evidencia empírica o en una base sólida teórica. Por eso el "saber convencional" debe ser continuamente avalado por la propaganda y los "expertos" al servicio del gobierno. Aunque cada crisis económica de importancia casi siempre ha conllevado desechar la "sabiduría convencional" anterior y substituirla por una nueva, que muchas veces a la postre resulta tan nociva como la anterior.

 

El último gran "saber convencional" empezó a ser hegemónico hacia principios de los '80 y es lo que conocemos como neoliberalismo, adoptado como credo por el FMI en la forma canónica llamada Consenso de Washington [2] . Aunque existen muchos políticos que se declaran independientes de las tesos neliberales, es evidente que sus políticas están influenciadas por el credo conocido como Consenso de Washington (CW). Ni siquiera gobiernos, nominalmente socialistas como el de Rodríguez Zapatero, escapan a dicha supeditación ideológica a dogmas neoliberales. En concreto me gustaría explicar aquí como el gobierno socialista español se ha apuntado al "tercer mandamiento neoliberal" del CW: la menor progresividad de los impuestos junto con la rebaja de impuestos (que tiene que ver con el "primer mandamiento"). Tal como explicaba recientmente, Carlos Segovia en un artículo en El Mundo [3], la nueva reforma fiscal del gobierno socialista supone una rebaja del impuesto de sociedades que pagan las empresas del 25% mientras que a los ciudadanos se aplicará una rebaja global de sólo el 6% del impuesto de la renta. (Tal vez convenga recordar aquí que el artífice de esta reforma, Pedro Solbes ministro de Economía, cuyo su nombramiento fue aplaudido en su día por ahora director del FMI, Rodrigo Rato, partidario firme del Consenso de Washington). No es sólo que la rebaja beneficie más al mundo empresarial. El estado español dejaría de ingresar 2500 millones de euros menos debido a ella frente a los 2000 millones de euros que se dejarán de ingresar por la rebaja a los ciudadanos, lo cual supone un cierto compromiso con el "primer mandamiento neoliberal" del CW. Además existe aún otro problema: ciertos datos empíricos que aún la rebaja del tipo impositivo máximo aumentaría probablemente la desigualdad social.

1. Unos pocos datos sobre nivel de impuestos

Resulta conveniente antes de explicar la relación entre desigualdad social y nivel de impuestos algunos datos. Si nos fijamos en el impuesto de la renta (el impuesto personal según los ingresos de cada persona individual) el más alto nivel está en Japón que aplica un tipo impositivo máximo del 65% (lo cual significa que las personas de más alta renta pueden llegar a pagar hasta el 65% de los mismos), pues bien resulta que Japón es uno de los países más igualitarios del mundo y con menor número de personas en la pobreza. A continuación van los países escandinavos (Suecia, Finlandia, Dinamarca) que son los que mayor nivel de bienestar material y social tienen en todo el mundo. Estos países se caracterizan por tener tipos impositivos máximos altos, es decir, en ellos las personas con más altos ingresos podían llegar a pagar un porcentaje alto de su renta [de hecho ese porcentaje máximo es lo que se llama tipo impositivo máximo]. Pues bien en Suecia una persona de altos ingresos puede llegar a pagar un 56% de lo ganado al fisco, un 60% en Holanda, un 59% en Dinamarca o un 55% en Finlandia, incluso en Alemania tenemos un 53%. En parte por eso esos países han llegado a tener una gran igualdad económica y los ha hecho muy competitivos y con altos niveles de calidad de vida, estupenda educación pública y excelente sanidad pública. El siguiente gráfico muestra los tipos impositivos actuales en diversos países:

Fuente: OCDE
En España el tipo máximo en 1996 era del 56%, pero llegó la ola neoliberal con Jose María Aznar y España bajó sus tipos al 48% y más tarde al 45%, según la propaganda de Aznar eso tuvo excelentes efectos en la economía que se reactivó "milagrosamente" en parte parte gracias a los impuestos (aunque existen otras alternativas de explicación menos milagorsas que no tienen que ver con el nivel de impuestos). Lo que es menos conocido y de lo cual la propaganda de Aznar no dijo ni una palabra es que simultáneamente a la bajada del impuesto personal que benefició más a las rentas más altas se subieron los impuestos indirectos [cosa que en general afecta peor a las rentas más bajas]. Pero lo importante del caso es que un buen número de electores tragaron el anzuelo y estando antentos a la propaganda aznarista tal vez para algunos de ellos su declaración final de la renta pudo resultar más baja creyeron en la rebaja de impuestos, que no era tal. Se trataba más bien de una redistribución desde impuestos de la renta que castigan a las rentas altas hacia una carga sobre los impuestos indirectos que afectan a quienes menos capacidad de ahorro tienen. En ese clima económico llega Zapatero al gobierno con su ministro de economía, Pedro Solbes que en su día elogió la política económica del PP y que a su vez fue recibido con aplausos por el PP (sintomático verdad?). Pues bien ahora por iniciativa incial de Solbes proponía un tipo impositivo máximo de la renta se va a bajar del 45% al 40%. Esto supondría que el gobierno "socialista" de España habría elegido el mismo nivel de impuestos que países tan poco igualitarios como Turquía, México o los USA, cosa desastrosa se examinamos la correlación estadística entre tipo impostivo máximo e índice de desigualdad económica.
2. ¿Por qué no deberíamos bajar los tipos impositivos máximos de la renta?: Más datos
Aclarado el panorama de los tipos impositivos máximos, es decir, el porcentaje máximo que pueden llegar a pagar las personas de ingresos más altos podemos ver qué relación guardan estos con la desigualdad económica. Para examinar la desigualdad económica usaremos el índice de desigualdad de Gini que es probablemente la medida más universalmente usada para medir dicha desigualdad. Tomando la misma muestra de países de la OCDE anteriores y tomando los datos del índice de desigualdad de Gini [4], podemos graficar los resultados para ver la relación entre ambos:
El gráfico muestra una correlación lineal moderada entre ambas variables. Cuanto mayor es el tipo impositivo, es decir, el porcentaje pagado por los más ricos menor desigualdad económica, tal como sugiere la línea punteada de tendencias [si miramos el gráfico con ojos de estadístico podemos ver que el índice de correlación lineal entre ambas variables es R2 = 0,434 lo que significa que R = 0,658, es decir, que si que casi el 66% de la variación (desviación tipo) entre países queda explicada si tenemos en cuenta su tipo impositivo, siendo el 34% de la variación restante debido a otros factores aleatorios no identificados, pero que en cualquier caso tienen una influencia menor en el grado de sigualdad).
A la luz de estos datos, una bajada de impuestos del tipo que tiene en mente el gobierno "socialista" alejaría a España del tipo máximo medio en la UE que es del 51% y probablemente haría aumentar la desigualdad económica (claro que el tipo impositivo máximo no es el único factor de que regula la desigualdad, pero los datos sugieren que es el más importante).
Finalmente alguien podría preguntar que ¿para qué deberíamos evitar la desigualdad de la renta? Existen varios buenos motivos:
1) En primer lugar está el tema de la justicia social
Aunque si alguien prefiere los argumentos más formales existen:
2) Empíricamente observamos que existe una correlación entre el PIB/cápita e igualdad de la distribución de la renta, el mecanismo sería muy simple debido a que la propensión marginal al consumo es una curva convexa [debido a la utilidad marginal decreciente del consumo de un bien] en un país en que toda la renta la tuvieran unos pocos ricos consumiría menos que un pais de personas igual de ricas, y por tanto estaríamos maximizando la utilidad total o binestar material. Como diría Keynes los impuestos son capaces de generar crecimientos en el ingreso nacional porque retiran fondos de los consumidores con propensión marginal a consumir menor que 1 y lo transfieren al estado que tiene propensión marginal a consumir igual a 1 [y si adquiere déficits de hecho mayor que 1]. Es así como los USA salieron de la gran depresión bajo Roosvelt a base de aumentar la demanda agragada aumentando el gasto público.
3) Relacionado con la justicia social, parece haber que cuando a la pobreza se suma la desigualdad social la delincuencia encuentra importantes incentivos (existen países pobres donde la delincuencia es razonablemente baja porque las personas son casi uniformemente pobres. Pero en países con Brasil donde existe una desigualdad de la renta espectacular unida a bolsas de pobreza lo que da regiones con altas tasas de criminalidad).
Sin embargo parece que el mal uso de las ideas liberales en economía gozan de tal popularidad, y los partidos políticos sienten tantos deseos de ganar votos diciéndole a la gente que les van a bajar los impuestos que se piede el buen juicio sobre los efectos a largo plazo a cambio de efectos propagandísticos a corto plazo sobre la población. Algo anda mal en las políticas económicas cuando un tipo como Zapatero decide seguir la equivocada linea de Aznar en este punto y lanzarse a una rebaja de impuestos de dudoso efecto positivo a largo plazo.
NOTAS

[1] P. Krugman: Pop Internationalism, the MIT press, Cambridge, Massachusetts,1986.

[2] La formulación orginal de diez puntos de 10 puntos es de John Williamson (1990).
[3] http://www.elmundo.es/mundodinero/2006/04/06/economia/1144313978.html
[4] http://www.nationmaster.com/graph-T/eco_dis_of_fam_inc_gin_ind
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Manera correcta de leer el periódico

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